Los Mossos detienen a tres personas por robo de cobre en la provincia de Girona
Agentes de los Mossos d’Esquadra detuvieron el día 24 de mayo, en la Cellera de Ter, a dos hombres, ambos de 43 años, y el 28 de mayo, en Sant Julià de Ramis, a un hombre de 59 años, como presuntos autores de un delito de hurto. A este último también se le acusa de un delito de resistencia y desobediencia a los agentes de la autoridad.
El primero de los hechos tuvo lugar el día 24 de mayo, alrededor de la una de la tarde, cuando los Mossos recibieron el aviso de que en la zona del carril bici de la Cellera de Ter había unos hombres que podrían estar cortando cable telefónico.
A su llegada, con los datos facilitados por unos testigos, empezaron la búsqueda hasta localizar, pocos minutos después, un vehículo ocupado por dos personas y lo detuvieron.
Durante el registro del coche, comprobaron que el maletero estaba lleno de cable de cobre. Además, también localizaron las herramientas necesarias para sustraerlo, concretamente, tres cizallas, unas tenazas, guantes, linterna, navaja y un destornillador.
Ante las evidencias, ambos hombres quedaron detenidos como presuntos autores de un delito de hurto.
El corte del cableado afectó a la conexión de internet y de telefonía de la zona del Pla d’Amunt. El peso del cobre intervenido era de 80 kilos y el precio de este material vendido como chatarra oscila entre 4,5 y 6 euros el kilogramo. Por tanto, el valor aproximado del cable de cobre localizado es de 485 euros.
La segunda detención se produjo sobre las tres de la madrugada del pasado 28 de mayo cuando los Mossos del Área Regional de Tráfico vieron cómo un vehículo, que circulaba por la AP-7, al detectar la presencia policial va disminuyó la velocidad y, poco después, aceleró aprovechando el adelantamiento de un camión. Los agentes dedujeron que con esta conducción tenían la finalidad de pasar desapercibidos y por este motivo hicieron indicaciones para que salieran de la AP-7.
Una vez fuera de la autopista, el vehículo aceleró bruscamente y se dio a la fuga a gran velocidad hasta que los Mossos los detuvieron a la altura del punto kilométrico 34 de la C-66.
La policía comprobó que en el interior de la furgoneta había 100 kilos de cable de cobre, que intervino junto a una sierra y unas cizallas. Ante este hecho, detuvieron al conductor por el hurto del cobre y por desobediencia a los agentes de la autoridad. Los otros dos ocupantes del vehículo huyeron por una zona boscosa muy densa y pudieron escabullirse.
El cobre intervenido en esta ocasión también provenía de línea telefónica. El peso era de 100 kilogramos, por tanto, el valor en el mercado es de 600 €.
Los detenidos, uno de ellos con antecedentes, pasaron al día siguiente de las detenciones a disposición del juzgado en funciones de guardia de sus partidos judiciales, Santa Coloma de Farners y Girona respectivamente.
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Dentro del plan operativo implementado por el cuerpo de Mossos d’Esquadra para combatir la sustracción de cobre , y concretamente en la vertiente inspectora , el día 28 de mayo, agentes de la Unidad Regional de Policía Administrativa y de Medio Ambiente realizaron comprobaciones en una nave de Sils donde intervinieron 1.326 kilogramos de cobre.
La empresa no presentó la licencia de actividad, ni pudo justificar que cumpla con el registro obligatorio ni de comunicación de las operaciones de compraventa.
Los responsables tampoco pudieron acreditar la procedencia del cobre localizado en el interior del local.
Los Mossos, levantaron actas de estos incumplimientos y las remitieron las actas a los organismos correspondientes que son el departamento de Servicios Territoriales del departamento de Interior, el Ayuntamiento del municipio y la Agència de residus de Catalunya.