Feijóo intenta ahora pillar votos de diputados del PSOE tras los discursos de Alfonso Guerra y Felipe González
«Yo también estoy de acuerdo en que la amnistía es la condena de la democracia». Son palabras de Alberto Núñez Feijóo este jueves desde el Congreso subiendo el tono contra Pedro Sánchez y la amnistía y haciéndose suyo el comentado discurso del ala crítica del PSOE, al que Felipe González y Alfonso Guerra pusieron voz este miércoles.
El líder del PP inicia así una nueva vía para intentar buscar apoyos para su investidura, prevista para el próximo martes y miércoles, y que casi todo el mundo da por hecho que va a ser fallida.
Feijóo es consciente de que los números para ser presidente no le salen, y por eso quiere intentar convencer a algunos diputados del PSOE para que le apoyen.
Por ahora, el ex presidente gallego cuenta con 172 votos a favor, entre PP, ultraderecha, UPN y Coalición Canaria. Pero en contra tiene 178, que son los del PSOE, Sumar, Bildu, ERC, Junts, PNV y BNG.
Zapatero tampoco hacía caso a lo que decían Felipe González y Alfonso Guerra
Así, el candidato del PP necesitaría que cuatro diputados del bloque le dieran un voto favorable en la primera votación, o bien que al menos siete se abstuvieran en la segunda, por lo que aprovecha las palabras de este miércoles de los ‘socialistas’, Alfonos Guerra y Felipe González para intentar arrastrar otras voces críticas del PSOE.
Sin embargo, nada hace pensar que pueda salir adelante, sobre todo si se tiene en cuenta que en cuanto volvió a la dirección del PSOE, Pedro Sánchez se encargó de defenestrar a los que habían sido críticos con la gestión.
De este modo, los actuales diputados en el Congreso son personas de la confianza del presidente del gobierno y que muy difícilmente se añadirían al carro de cambiarse de chaqueta, mientras que tampoco parece posible que la dirección del partido quiera forzar a Pedro Sánchez a cambiar de rumbo.
Feijóo ha agotado su último cartucho llamando al presidente de Castilla la Mancha, Emiliano García-Page, que también ha criticado la posible amnistía.
¿Es inevitable la repetición de las elecciones?
