David Cameron investigado por presionar a Boris Johnson en nombre de Uber, cuando este era alcalde de Londres
Se ha instado al abogado que investiga los cabildeos de David Cameron en nombre de la firma de préstamos Greensill a ampliar su investigación para cubrir el papel del ex primer ministro en presionar al entonces alcalde de Londres, Boris Johnson, para evitar las restricciones propuestas a Uber en la ciudad.
Steve McNamara, director de la Licensed Taxi Drivers’ Association, que representa a los 24.000 taxistas de Londres, ha pedido a Nigel Boardman que amplíe su investigación para incluir las «presiones de cabildeo» de Cameron como primer ministro.
Hace cuatro años, una investigación del Daily Mail afirmó que Cameron y el entonces canciller George Osborne dijeron a sus asistentes que presionasen a Boris Johnson, quien era alcalde de Londres en ese momento, en contra de las restricciones propuestas a Uber.
La represión planeada por Johnson siguió a los temores de que Uber estuviera sacando los taxis del servicio público y aumentando el tráfico, la contaminación del aire, el aparcamiento ilegal y los accidentes.
En septiembre de 2015, Johnson dijo que Transport for London (TfL) estaba considerando 25 medidas, entre ellas hacer que Uber y otras empresas similares esperasen al menos cinco minutos entre la reserva del servicio y la recogida del cliente.
Se esperaba que esto frenara la proliferación de los VTC, pero el alcalde y sus ayudantes comenzaron a recibir mensajes de Downing Street, de Cameron y Osborne.
En ese momento, Cameron tenía relaciones personales cercanas con Rachel Whetstone, la entonces vicepresidenta senior de políticas y comunicaciones de Uber, y su marido Steve Hilton, quien fue su director de estrategia de 2010 a 2012.
Daniel Korski, subdirector de la unidad de políticas de Cameron, dirigió conversaciones secretas sobre crisis entre los ministros, el alcalde y su personal. En enero de 2016, el alcalde decidió eliminar casi todas las restricciones que no le gustaban a Uber.
En su carta Boardman, McNamara escribió:
«Las intervenciones sin precedentes… incluyeron mensajes de texto directos que se cree que fueron enviados por el Cameron y Osborne al alcalde, así como funcionarios del número 10, asesores especiales y ministros del gabinete… para enviar un mensaje claro de que los cambios propuestos no fueron bienvenidos, incluso gritando a los funcionarios del Ayuntamiento».
Afirmó que el cabildeo de Cameron, Osborne y otros funcionarios del número 10 equivalía a un «abrazo de Uber y un esfuerzo para proteger su posición en el mercado».
En marzo de 2017, Downing Street fue acusado de encubrimiento por no divulgar detalles de la operación de cabildeo después de una solicitud de Freedom of Information. Transport for London (TfL) publicó los correos electrónicos entre Korski y el personal del alcalde.
La Oficina del Comisionado de Información investigó, pero el Gobierno fue absuelto debido a las reglas de la Oficina del Gabinete que permiten a los funcionarios destruir «información trivial», incluidos los correos electrónicos, en un plazo de tres meses.
Caroline Pidgeon, miembro de la Asamblea Liberal Demócrata de Londres, también quiere que la investigación se amplíe más allá del cabildeo de Cameron para que Greensill Capital emita préstamos respaldados por el gobierno a empresas durante la pandemia. Dijo que tenía que «abordar la cultura de cabildeo laxa».
David Cameron ‘lobbied on behalf of Uber’ in London | Ex-PM said to have urged Boris Johnson, then London mayor, to drop tough regulationshttps://t.co/SkVcOHrSEk
— LTDA Taxi News (@LTDAtaxinews) April 26, 2021
Uber y TfL mantuvieron dos reuniones secretas en Londres
El director ejecutivo de Uber Technologies, Dara Khosrowshahi, mantuvo al menos dos reuniones secretas con Mike Brown, comisionado de Transport for London (TfL), en medio de la batalla legal que eclipsaba la mayor operación británica de la aplicación de transporte, en diciembre de 2019.
Una de las reuniones tuvo lugar cuando Khosrowshahi fue al Foro Económico Mundial en Davos, Suiza y no ha sido divulgada públicamente.
Se produjo dos meses después de que Uber fuera prohibido por los reguladores en Londres por segunda vez en poco más de dos años, con el alcalde de Londres.
El alcalde de Londres veta a los taxis para favorecer a Uber
«Esta basura tóxica del alcalde es una mierda ficticia total. Son falsas noticias del más alto nivel».
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