TV3 estrena 'Altsasu', la miniserie que algunos quisieron vetar en Euskadi

TV3 estrena ‘Altsasu’, la miniserie que algunos quisieron vetar en Euskadi

Este lunes por la noche, tras el «Telenotícies», se estrena «Altsasu», una miniserie de cuatro capítulos, coproducida por TV3 y Euskal Telebista, basada en la historia que ha llevado a ocho jóvenes en prisión, condenados por terrorismo, por una pelea en un bar. La serie ya se está emitiendo en el País Vasco (se estrenó el 9 de diciembre) con gran éxito de audiencia y una cierta polémica generada por la queja de algunos partidos que querían impedir la emisión.

La madrugada del 15 de octubre de 2016, en plenas fiestas del pueblo navarro de Altsasu, las vidas de ocho jóvenes se entrecruzaron con las de dos guardias civiles fuera de servicio y sus parejas.

¿Qué pasó esa noche? Los implicados hablan de una simple pelea de bar, pero el caso derivó de los juzgados de Pamplona hasta la Audiencia Nacional a partir de una denuncia de una asociación de víctimas del terrorismo para que el caso se investigara, precisamente, por terrorismo.


La ignominia del caso Altsasu

 

La ignominia del caso Altsasu

 


50 años de prisión

A partir de aquí comienza una auténtica pesadilla para los acusados y sus familias, que tienen que hacer frente a una prisión preventiva y, finalmente, a una condena que descarta el terrorismo, pero suma más de 50 años de prisión por atentado contra agentes de la autoridad y lesiones.

De los 10.000 atentados a la autoridad cometidos en España durante el año 2016, todos terminaron en multa menos este.

Rodada en Altsasu y en diversos puntos del País Vasco y Navarra, además de la cárcel de Segovia, la serie se inspira en esta historia real, se centra en los sentimientos de los acusados ​​–y su entorno– por el calvario vivido, y narra aspectos desconocidos de un caso judicial que ha sido muy mediático y extremadamente controvertido.

Muchos medios españoles corrieron a construir un relato con palabras como «emboscada» o «linchamiento», calificar a los jóvenes de «radicales» y «proetarras» y sugerir que en los hechos hubo premeditación, organización y ensañamiento.

La defensa siempre ha hablado de montaje policial, de relato artificial y de desproporción en términos jurídicos. Además, denuncia numerosas vulneraciones, como que los hechos no se han reconstruido judicialmente y que en el juicio no se admitieron testigos ni pruebas de la defensa.

Es por ello que ya han llevado el caso a Estrasburgo, porque cuestionan que se haya hecho un juicio justo y con garantías. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos está estudiando ahora si la admite a trámite.

Tercer grado

En julio, los tres jóvenes del grupo que fueron encarcelados pocas semanas después de la pelea y condenados a entre ocho años y medio y nueve años y medio de prisión, Adur Ramírez de Alda, Jokin Unamuno y Oihan Arnanz, obtuvieron el tercer grado penitenciario, lo que les permite salir de prisión y pasar lo que les queda de condena durmiendo en prisión entre semana.

En un primer momento, la Fiscalía llegó a pedir medio siglo de prisión para siete de los ocho acusados y 62 años para Arnanz. Finalmente, la Audiencia Nacional descartó las imputaciones de terrorismo y los terminó condenando a entre 2 y 13 años de prisión, que el Tribunal Supremo rebajaría a entre 1 y 9 años.

Caso Altsasu

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