Ryanair inicia otros tres días de huelga con las primeras cancelaciones y algunos retrasos
Los tripulantes de cabina de Ryanair inician este jueves tres nuevas jornadas de huelga para reclamar un nuevo convenio. En el primer día de paros de esta segunda tanda, ya se han registrado a primera hora cancelaciones en vuelos de la compañía en el aeropuerto de El Prat.
Los vuelos en dirección a París, Billund y Cracovia no han salido, según la página web de AENA, que anuncia también los primeros retrasos.
Con las cancelaciones ya hay colas en los mostradores de la compañía para presentar reclamaciones.
Durante el día, y hasta el 2 de julio, mientras dura la huelga, pueden resultar afectados otros vuelos. En la primera tanda de huelga, durante el puente de Sant Joan, se cancelaron dieciséis vuelos de la compañía.
La situación se puede complicar más en los próximos días porque el paro de Ryanair coincidirá el viernes y el sábado –1 y 2 de julio– con la protesta convocada por Easyjet, que también denuncia la «situación de bloqueo» en la que se encuentra la negociación del nuevo convenio.
Los servicios mínimos fijados por el gobierno español varían entre el 36% y el 80% en función de la distancia y transporte alternativo. Los mismos que la semana pasada, en la primera tanda de huelga, los sindicatos ya calificaron de «totalmente abusivos» y que «vulneran el derecho de huelga».
Servicios mínimos
En el caso del aeropuerto de El Prat, los servicios mínimos establecen que, si el vuelo se dirige a destinos fuera de la península, el servicio deberá estar garantizado en el 80% de los trayectos, mientras que, si el recorrido es igual o superior a 5 horas en medio de transporte alternativo, los servicios mínimos serán del 58%.
Por último, para las rutas con ciudades españolas peninsulares con un recorrido inferior a las 5 horas en medio de transporte alternativo, serán del 36%.
El sindicato USO, uno de los que convoca la huelga, acusa a la compañía de aplicar unos servicios mínimos del 100%, según la secretaria general del sindicato en la aerolínea, Lidia Arasanz. La compañía «ha decidido que todos sus vuelos programados son servicios mínimos», ha dicho y le acusa de haber convocado a todas las tripulaciones en el Estado.
«Ryanair vuelve a aplicar sus propios servicios mínimos del 100%, su propia ley, y obliga a todos sus tripulantes a volar y pisando su derecho a huelga.»
Además, asegura que Ryanair ha comunicado a los pilotos que todas las tripulaciones tienen cartas de servicios mínimos con el vuelo detallado que deben operar y una lista de otros posibles vuelos.
«Es totalmente ilegal», sentencia Arasanz, que lamenta las «coacciones y amenazas de la compañía» y apunta que los pilotos tienen la consigna de retener a las tripulaciones en los aviones para garantizar que se podrán operar los siguientes vuelos y que les recuerden que deben ofrecer comida y bebidas a los viajeros.
Los motivos de la huelga
La protesta la han convocado dos sindicatos, USO y Sitcpla, para exigir a la aerolínea que retome las negociaciones del primer convenio colectivo de la empresa para los tripulantes de cabina, puestos en marcha hace ocho meses.
A mediados de junio, cuando se convocaron las seis jornadas de protesta en total, Lidia Arasanz, recordaba que Ryanair es la «única compañía internacional» que no dispone de un convenio colectivo.
La dirección de la compañía y el sindicato CCOO firmaron hace unas semanas un acuerdo que, según Sitcpla y USO, se limita a recoger condiciones de trabajo ya reivindicadas para ellos como resultado de huelgas anteriores. Para estos sindicatos, esta estrategia responde a un intento de «anularlos como sindicatos ante la negativa a firmar las condiciones precarias ofrecidas».
