Los trabajadores penitenciarios vuelven a bloquear las cárceles catalanas

Los trabajadores penitenciarios vuelven a bloquear los accesos a las prisiones catalanas





Los trabajadores penitenciarios vuelven a bloquear este lunes por la mañana los accesos a las cárceles de Lledoners, Puig de les Basses, Brians 1 y 2 y Mas d’Enric. Decenas de funcionarios de prisiones han colocado de madrugada neumáticos, en algunos casos encendidos, ramas y piedras para evitar el pase al centro penitenciario.

En cuanto a las cárceles de Quatre Camins i Joves, los Mossos lo han evitado y han obligado a dejar un carril abierto. En la cárcel de mujeres, conocida popularmente como Wad-Ras, hay una veintena de trabajadores concentrados que han permitido la salida de los internos en tercer grado y la entrada de alimentos, pero no el resto de movimientos.

Los presos, sin poder salir

El Departament de Justicia ha confirmado que sólo las cárceles de Quatre Camins i Joves, que comparten acceso, pueden abrir las celdas este lunes por la mañana. Se trata del centro en el que los Mossos han impedido el bloqueo por parte de los trabajadores. Quatre Camins puede abrir, pero sin actividad, y Joves también podrá hacerlo. En cuanto a las cárceles de Mas de Enric, Ponent y Puig de les Basses, los internos deberán permanecer sin salir.

Situación en las cárceles, por la mañana

En Brians, los Mossos cortaron los accesos en vehículo a las dos prisiones, pero un centenar de trabajadores accedieron caminando e impiden el último acceso a los centros penitenciarios con una pequeña hoguera y neumáticos. Sin embargo, la presencia policial es discreta. En cambio, en Quatre Camins hay un fuerte despliegue policial con unidades antidisturbios que dejan un carril abierto para que la cárcel no quede bloqueada.

En el otro carril se sitúan los trabajadores, una cincuentena, que han hecho una hoguera, aunque los Mossos les han advertido de que tendrán que apagarla. Los funcionarios denuncian que se ha hecho quedar a dormir a muchos compañeros para garantizar el turno por la mañana, y muchos de ellos interinos. También se quejan de que las agresiones en 10 años han pasado de 47 anuales a 300 en 2023.

En Lledoners, un centenar de funcionarios han cerrado el pase a prisión con neumáticos y han hecho fuego, bloqueando el pase a la carretera que da acceso al centro penitenciario. Algunos trabajadores han entrado de forma voluntaria en el interior porque se necesitan refuerzos en algunos módulos.

En cuanto a Mas d’Enric, el cierre se realiza a unos 100 metros de la cárcel con árboles, piedras y neumáticos, en este caso sin encender. Hay una cincuentena de trabajadores que han venido de madrugada para evitar que los Mossos impidieran el bloqueo. Han hecho pintadas en algunos muros de las instalaciones pidiendo la dimisión de la consellera de Justicia y del director de la prisión.

En la valla se mantienen las dos pancartas que ya había el viernes con los lemas ‘Justicia Núria’ y ‘Más seguridad, más protección y más recursos’. En las prisión de mujeres, inicialmente se ha permitido la entrada y salida de personas. Han podido acceder repartidores de alimentos y también han salido los internos en tercer grado, pero la veintena de trabajadores que se han concentrado en ellos no permitirán más movimientos.

En el centro de Puig de les Basses sólo dejarán volver a los internos que vuelven del permiso de fin de semana y permitirán la entrada de Mossos. Una cincuentena de personas están ahí desde las 4 de la mañana y han advertido que no se marcharán hasta que no dimitan Gemma Ubasart y el secretario de Medidas Penales, Amand Calderó.