¿Qué sucede si contraes el nuevo coronavirus?
El nuevo coronavirus que surgió en China a fines del año pasado se ha extendido a al menos 185 países en seis continentes, y la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró que el brote del patógeno era una pandemia.
La cifra de muertos por el virus ha aumentado a más de 136.067 y el número de casos reportados es más de dos millones a nivel mundial, según datos compilados por la Universidad Johns Hopkins. Más de 500.000 personas se han recuperado hasta ahora.
A medida que el miedo se ha extendido, los científicos e investigadores de todo el mundo han aumentado sus esfuerzos para comprender el nuevo virus y cómo afecta al cuerpo humano. Actualmente, no existe una vacuna para prevenir la enfermedad por coronavirus.
Esto es lo que sabemos sobre el coronavirus y la enfermedad respiratoria altamente infecciosa que causa, COVID-19, y qué sucede si usted está infectado.
Diferentes niveles de gravedad
El nuevo virus pertenece a una familia de virus que pueden causar enfermedades respiratorias en humanos que van desde el resfriado común hasta enfermedades más graves, como el síndrome respiratorio agudo severo (SARS).
Se cree que se transmitió a los humanos de una fuente animal aún no identificada, el nuevo virus se propaga principalmente a través de gotitas respiratorias, como las que se generan cuando una persona infectada tose o estornuda.
En promedio, tarda entre cinco y seis días en mostrar síntomas después de infectarse. Sin embargo, algunas personas que portan el virus permanecen asintomáticas, lo que significa que no muestran ningún síntoma.
El virus se multiplica en el tracto respiratorio y puede causar una variedad de síntomas, según la doctora Maria Van Kerkhove, quien dirige el Programa de Emergencias de Salud de la OMS.
«Tiene casos leves, que se parecen al resfriado común, que tienen algunos síntomas respiratorios, dolor de garganta, secreción nasal, fiebre, hasta la neumonía. Y puede haber niveles variables de gravedad de la neumonía a través de múltiples órganos», dijo Van Kerkhove.
Sin embargo, en la mayoría de los casos, los síntomas se han mantenido leves.
«Hemos visto algunos datos sobre unos 17.000 casos y, en general, el 82 por ciento de ellos son leves, el 15 por ciento de ellos son severos y el 3 por ciento de ellos están clasificados como críticos».
Fiebre, tos, neumonía
Un estudio de 138 pacientes infectados con el nuevo virus en Wuhan, publicado en el Journal of the American Medical Association (JAMA), mostró que los síntomas más comunes fueron fiebre, fatiga y tos seca. Un tercio de los pacientes también informó de dolor muscular y dificultad para respirar, mientras que alrededor del 10 por ciento tenía síntomas atípicos, como diarrea y náuseas.
Los pacientes, que tenían entre 22 y 92 años, ingresaron en el Hospital Zhongnan de la Universidad de Wuhan entre el 1 y el 28 de enero. «La edad media de los pacientes es de entre 49 y 56 años», dijo JAMA. «Los casos en niños han sido raros».
Si bien la mayoría de los casos parecen ser leves, todos los pacientes desarrollaron neumonía, según JAMA.
Alrededor de un tercio posteriormente desarrolló dificultades respiratorias graves, que requieren tratamiento en la unidad de cuidados intensivos. Los enfermos críticos eran mayores y tenían otras afecciones subyacentes, como diabetes e hipertensión.
Seis de los 138 pacientes murieron, una cifra que equivale a una tasa de mortalidad del 4,3 por ciento, que es más alta que las estimaciones de otras partes de China. Hasta el momento, menos del 2 por ciento del número total de personas infectadas han muerto por el virus, pero esa cifra podría cambiar.
Mientras tanto, un estudio publicado el 24 de enero en la revista médica The Lancet encontró lo que llamó una «tormenta de citoquinas» en pacientes infectados que estaban gravemente enfermos. Una tormenta de citoquinas es una reacción inmune severa en la cual el cuerpo produce células inmunes y proteínas que pueden destruir otros órganos.
Algunos expertos dicen que esto podría explicar las muertes en pacientes más jóvenes. Las estadísticas de China muestran que algunas personas en sus 30, 40 y 50 años, que no se sabía que tenían problemas médicos anteriores, también murieron a causa de la enfermedad.
Una cronología de cómo progresa la enfermedad
Según JAMA, en promedio, las personas se quedaron sin aliento dentro de los cinco días posteriores al inicio de sus síntomas. Se observaron problemas respiratorios severos en aproximadamente ocho días.
El estudio no dio un cronograma de cuándo ocurrieron las muertes.
Sin embargo, un estudio anterior publicado en el Journal of Medical Virology el 29 de enero dijo que, en promedio, las personas que murieron lo hicieron dentro de los 14 días posteriores al inicio de la enfermedad.
El New England Journal of Medicine, en un estudio publicado el 31 de enero, también informó de cómo la infección por coronavirus afecta al cuerpo con el tiempo.
Este estudio examinó los datos médicos de un hombre de 35 años, el primer caso de infección en Estados Unidos.
El primer síntoma fue una tos seca, seguida de fiebre.
En el tercer día de enfermedad, presentó náuseas y vómitos seguidos de diarrea y molestias abdominales en el sexto día. Al noveno día, había desarrollado neumonía y tenía dificultades para respirar.
Al duodécimo día, su condición había mejorado y su fiebre estaba disminuyendo.
El día 14, estaba asintomático, excepto por una tos leve.
Según los informes de los medios locales, lo ingresaron el 19 de enero y fue dado de alta del hospital en la primera semana de febrero.
Tedros Adhanom Ghebreyesus, jefe de la OMS, dijo que las estadísticas de China sugieren que el tiempo de recuperación para las personas con enfermedad leve es de aproximadamente dos semanas. Las personas con enfermedad grave o crítica pueden tardar entre tres y seis semanas en recuperarse.
El 28 de febrero, Tedros dijo que las naciones deberían prepararse para una pandemia potencial, ya que los países aparte de China en ese momento representaban las tres cuartas partes de las nuevas infecciones.
A principios de marzo, advirtió que la escasez mundial y el aumento de los precios de los equipos de protección estaban comprometiendo las capacidades de los países para responder a la epidemia, y pidió a las empresas y gobiernos que aumenten la producción en un 40 por ciento.
El 11 de marzo, el jefe de la OMS calificó a COVID-19 como una pandemia y expresó su preocupación por los «niveles alarmantes de propagación y gravedad, y por los niveles alarmantes de inacción».
Dos días después, Tedros dijo que Europa se había convertido en el epicentro de la pandemia después de informar más casos y muertes que «el resto del mundo combinado, aparte de China».
Pero luego, Estados Unidos se convirtió en el país más afectado.
Para el 15 de abril, el número de muertos en Estados Unidos había superado los 26.000 en medio de más de 609.000 casos, según un recuento de la Universidad Johns Hopkins.
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