Carlos Mazón dimite como presidente de la Generalitat y pide al PP y a la ultraderecha consensuar su relevo
El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha anunciado este lunes su dimisión del cargo, alegando motivos personales y el desgaste sufrido tras la tragedia causada por la DANA del pasado octubre. En su comparecencia desde el Palau de la Generalitat, Mazón afirmó con emoción: “Ya no puedo más”, subrayando que liderar el proceso de recuperación exige una fuerza que ni él ni su familia poseen.
Una dimisión sin convocatoria electoral
Mazón ha optado por no convocar elecciones autonómicas, y ha apelado al PP y a la ultraderecha de Vox —socios de gobierno— para que acuerden un sustituto que mantenga la mayoría parlamentaria surgida de las urnas. El todavía presidente insistió en que la Generalitat necesita “consolidar un nuevo tiempo” y llamó a la “responsabilidad de la mayoría parlamentaria viva y vigente” para designar un nuevo líder.
Autocrítica y balance personal tras la DANA
El dirigente popular explicó que había guardado silencio hasta ahora porque, en plena crisis, hablar de su futuro político le habría parecido “una frivolidad”. En esta ocasión, ofreció una reflexión personal sobre su gestión, reconociendo errores cometidos durante aquellos días.
Entre ellos, destacó no haber cancelado su agenda pública mientras se desarrollaba la DANA y no haber dado explicaciones a tiempo, lo que —dijo— alimentó rumores dolorosos. También admitió que no solicitó la declaración de emergencia nacional, aunque responsabilizó al Gobierno central de haber “dejado sola” a la Comunidad Valenciana por estrategia política.
Aun así, Mazón defendió que no recibió información clave sobre el desbordamiento del barranco de Poio ni sobre las víctimas hasta la madrugada posterior al desastre. “Sé que cometí errores y viviré con ellos toda la vida”, reconoció visiblemente afectado.
Reacciones políticas y escenario de sucesión
La dimisión de Mazón ha abierto un intenso movimiento interno en el PP valenciano. Los presidentes provinciales —Vicent Mompó, Toni Pérez y Marta Barrachina— se reunieron el pasado viernes junto al secretario general Juanfran Pérez Llorca para analizar la situación y buscar un nombre de consenso.
El perfil que gana fuerza es el de Vicent Mompó, presidente de la Diputación de Valencia, aunque desde la dirección nacional del PP se valora a la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, como candidata idónea para relevar a Mazón sin necesidad de convocar elecciones. De momento, no existe un calendario oficial para la sucesión, lo que mantiene el escenario político en plena incertidumbre.
Crisis política y desgaste personal
La presión sobre Mazón se intensificó tras el funeral de Estado por las víctimas de la DANA, donde fue abucheado por parte del público. El propio presidente reconoció que ese día marcó un punto de inflexión en su decisión. Desde entonces, ha permanecido recluido en Alicante, reflexionando junto a su familia antes de comunicar su renuncia.
El caso sigue además su curso judicial. Este lunes ha declarado Maribel Vilaplana, la periodista que almorzó con Mazón durante las horas críticas de la catástrofe, mientras que el martes se iniciará en el Congreso la comisión de investigación sobre la gestión de la DANA, en la que el expresidente está citado a comparecer el 17 de noviembre.
Con su salida, Carlos Mazón pone fin a una etapa marcada por la tragedia, el desgaste político y la presión interna en su partido, dejando a la Comunitat Valenciana ante un nuevo escenario político en busca de estabilidad.





































