Detienen a una mujer por 14 estafas en Internet por valor de 20.000 €

Detienen a una mujer por 14 estafas en Internet por valor de 20.000 €

La Policía Nacional ha detenido en Girona a una mujer por 14 estafas en Internet.

Engañó a vendedores de plataformas de compraventa entre particulares, se quedó los productos valorados en más de 14.000 euros y además los estafó en más de 5.500 euros.

Se trata de un nuevo caso de estafa llamada de Wallapay que según la policía afecta principalmente a vendedores que anuncian sus productos en redes de compra y venta entre particulares.

La policía asegura que detrás de este tipo de estafa, llamado Wallapay, que es muy conocido en Internet desde hace un par de años, hay organizaciones criminales asentadas en África y que afecta a vendedores de artículos que se ‘anuncien en plataformas de compra y venta entre particulares, como Wallapop.

La estafa consiste en que los ciberdelincuentes fingen cerrar un trato con el vendedor y lo engatusan para hacer el pago a través de Wallapay, que presentan como una plataforma segura de pago.

Lo que las víctimas no saben es que la plataforma de pago no existe, y que el correo electrónico que reciben del vendedor donde se les dice que han recibido el dinero, es falso.

Según la Policía Nacional, este es el más pequeño de los problemas, ya que, en la falsa comunicación de pago, los autores de la estafa hacen constar que han pagado por el artículo más de lo convenido. Un hecho que suele pasar desapercibido a las víctimas.

La estafa sigue su curso y el vendedor remite su artículo a la dirección que el ciberdelincuente le ha proporcionado.

Una vez el artículo está en camino, comienza la segunda fase de la estafa

El supuesto comprador reclama al vendedor que le devuelva el dinero que supuestamente ha cobrado de más. De esta manera, las víctimas no sólo pierden su artículo, sino que además les estafan cantidades que oscilan entre los 300 y los 600 euros.

La Policía Nacional ha investigado y ha podido comprobar que la arrestada en su día había colgado un anuncio pidiendo trabajo y que desde aquí la organización criminal la captó.

De entrada, la mujer sólo se encargaba de recibir los paquetes en su casa y luego venderlos.

Por lo tanto, ella no contactaba con las víctimas sino que era la misma banda que lo hacía. A partir de aquí, pasado un tiempo la convencieron, según fuentes policiales, que les facilitara el número de cuenta y ahí, recibiría el dinero de la estafa. La policía ha podido constatar que la mujer tenía muchos movimientos en su cuenta y se le ha arrestado por los hechos.

Por lo tanto, al final las mulas de estos grupos criminales son, dice la policía, aquellas que se acaban identificando durante la investigación y las primeras en ser arrestadas.

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