Ayuso deja en manos de la multinacional Glovo el reparto de comida a domicilio a personas vulnerables
La Consejería de Políticas Sociales de la Comunidad de Madrid tiene previsto cerrar un convenio con Glovo para el reparto de comida a domicilio a personas vulnerables que no puedan recoger esos alimentos por motivos de salud o movilidad reducida.
El Gobierno que preside Isabel Díaz Ayuso está cerrando este acuerdo de colaboración con la multinacional justo cuando la Inspección de Trabajo ha sancionado a Glovo con una multa de 56,7 millones de euros por el fraude en la contratación de más 7.800 repartidores en Madrid, con lo que suma un total de 205,3 millones por fraudes a la Seguridad Social.
El acuerdo para el reparto de comida incumpliría la ley general de subvenciones en su artículo 19, que establece que los beneficiarios o las entidades colaboradoras con la administración deben estar “al corriente en el cumplimiento de sus obligaciones con la Seguridad Social”. Algo que incumple Glovo, de largo.
El diputado regional de Mas Madrid, Emilio Delgado, ha recordado las sanciones millonarias a la compañía por incumplir la normativa laboral con falsos autónomos.
“La Comunidad de Madrid considera que para gestionar los comedores sociales y llevar la comida a las personas sin recursos la empresa idónea es Glovo, que ha levantado su fortuna literalmente aplastando los derechos de sus trabajadores, y que es un ejemplo del capitalismo más descarnado, el buque insignia de la precariedad laboral en España”.
“Estos repartidores son trabajadores precarios que podrían acabar perfectamente acudiendo a los comedores sociales a los que van a ir trabajar. Esa es la distopía liberal de Ayuso”.
Emilio Delgado en la sesión de control al Gobierno durante el Pleno regional en la Asamblea de Madrid / Vídeo: Más Madrid