Venezuela alerta a la ONU sobre la amenaza sin precedentes de Estados Unidos en el Caribe
El Gobierno de Venezuela ha enviado una carta al secretario general de la ONU, António Guterres, alertando sobre un despliegue militar estadounidense en el Caribe que califican como un nivel de amenaza sin precedentes. En el comunicado, Caracas insta a Guterres a exhortar a Washington a cesar sus acciones y respetar la soberanía, la integridad territorial y la independencia del país latinoamericano.
Comunicación oficial ante la ONU
La representación permanente de Venezuela ante Naciones Unidas entregó la carta en la que denuncia los recientes y peligrosos desarrollos de la política de hostigamiento de Estados Unidos, según informó el ministro de Exteriores, Yván Gil, a través de un comunicado.
El documento subraya que estas agresiones han escalado con sanciones ilegales, campañas de descrédito, desconocimiento de instituciones legítimas y judicialización con fines políticos, alcanzando ahora un nivel de amenaza sin precedentes con el despliegue militar estadounidense en el Caribe.
Maduro agradece a Petro el despliegue de 25.000 militares en la frontera con Colombia
Presencia militar estadounidense en el Caribe
Venezuela señala en particular la llegada de destructores, un crucero lanzamisiles y un submarino nuclear de ataque rápido. Según el gobierno venezolano, es la primera vez en la historia que se introducen activos militares con capacidad nuclear en la región.
Las autoridades destacan que esta acción viola el Tratado de Tlatelolco, que establece la desnuclearización de América Latina, y constituye una infracción flagrante de la Carta de Naciones Unidas.
Riesgos para la paz y la estabilidad hemisférica
Caracas advierte que la presencia de armamento nuclear en el Caribe:
- Atenta contra la estabilidad hemisférica.
- Erosiona la confianza en el régimen internacional de no proliferación y desarme.
- Pone en riesgo la paz y la seguridad internacionales.
Por ello, Venezuela solicita a Guterres que exhorte a Estados Unidos a cesar sus acciones hostiles y respete los derechos soberanos del país, enfatizando que los pueblos no aceptarían la inacción internacional frente a esta amenaza.
El gobierno venezolano insiste en que nunca aceptará la imposición de la fuerza ni la violación de sus derechos inalienables, manteniendo su vocación de paz.
Contexto reciente de tensión con Estados Unidos
En las últimas semanas, la administración de Donald Trump intensificó la presión sobre Venezuela, primero, aumentando a 50 millones de dólares la recompensa por información que lleve a la captura del presidente Nicolás Maduro, y después, con el despliegue de buques militares frente a sus costas.
Estados Unidos afirma que estas naves forman parte de una campaña contra el narcotráfico, delito del que acusa a Maduro. Mientras, el ministro del Interior, Diosdado Cabello, descarta una invasión, aunque el gobierno venezolano anunció el movilización de 4,5 millones de personas para integrarse a las milicias populares.
La oposición venezolana también ha sugerido la posibilidad de un enfrentamiento. Antonio Ledezma, exalcalde de Caracas, afirmó desde Madrid que los militares estadounidenses no están en el Caribe para “ver delfines”, dejando entrever la preocupación por posibles operaciones militares.
