Gélidas tormentas en EEUU coartan los planes navideños y derriban las líneas eléctricas
Las fuertes tormentas en EEUU han dejado 1,7 millones de hogares y negocios sin electricidad, mientras millones de personas se preocupan por cómo la perspectiva de más apagones afectará a sus planes para viajar en estas fiestas.
Más de 200 millones de personas estaban bajo advertencias climáticas este sábado, ya que los vientos helados hicieron que las temperaturas bajaran hasta menos 55 grados, según el Servicio Meteorológico Nacional (NWS).
Las ventiscas cegadoras, la lluvia helada y el frío glacial que envolvió gran parte del país cortaron el suministro eléctrico desde Maine hasta Seattle, mientras que un importante operador de la red eléctrica advirtió a los 65 millones de personas a las que sirve en el este de EEUU que habría apagones continuos.
En todo el país, las autoridades han atribuido al menos una docena de muertes a la exposición, accidentes de tránsito en carreteras heladas y cubiertas de nieve por los efectos de las tormentas en EEUU, incluidas dos personas que murieron en sus casas en las afueras de Buffalo, Nueva York, cuando los equipos de emergencia no pudieron llegar debido a la ventisca.
La tormentas en EEUU comenzaron a principios de semana con el derribó de líneas eléctricas, quedando las carreteras con montones de coches siniestrados en accidentes mortales y provocó que más de 1.000 vuelos fueran cancelados hasta el momento este sábado.
El viernes, la cantidad de vuelos cancelados llegó a casi 5.700
Las fuertes nevadas y los vientos se han apoderado de gran parte de la nación, incluidos los estados del sur normalmente templados.
La tormenta fue casi sin precedentes en su alcance, extendiéndose desde los Grandes Lagos cerca de Canadá hasta el Río Grande a lo largo de la frontera con México.
La lluvia helada cubrió gran parte del noroeste del Pacífico con una capa de hielo, mientras que el noreste se enfrenta a la amenaza de inundaciones costeras.
Las carreteras en el medio oeste se han visto afectadas y las autoridades en Indiana, Michigan, Nueva York y Ohio instaron a los conductores a evitar los viajes que no sean imprescindibles.
