Martinez-Almeida sigue sin regular los VTC
El Ayuntamiento de Madrid está trabajando en una nueva ordenanza para dotar al taxi de las herramientas necesarias para competir con las VTC en un momento en el que la flota se ha casi cuadruplicado en poco más de un año y las aplicaciones se están comiendo el servicio público.
José Luis Martínez Almeida se ha reunido en un par de ocasiones con representantes del sector del taxi para establecer las líneas sobre la nueva regulación.
La Asociación de Presión Taxi Proyect 2.0, liderada por Tito Álvarez, recurrió el reglamento, que está aún pendiente.
Entre las propuestas que se están estudiando destaca la flexibilización del horario del taxi, principalmente los fines de semana, que es cuando la mitad de la flota tiene que parar y la ratio entre los vehículos del gremio y las VTC se reduce a uno (ahora hay 1,9 taxis por cada vehículo de Uber y Cabify) ya que estas pueden operar sin limitaciones.
La Ley indica que debe de haber un vehículo VTC por cada 30 taxis
Así, el plan es ampliar los horarios del taxi el fin de semana y que haya más unidades operando mediante el adelanto de los refuerzos. Es decir, que un taxi que libra ahora tiene que empezar a trabajar el domingo a las 20:00 o a las 22:00 horas pueda salir a las 14:00 horas.
A su vez, la idea es que se reduzca el número de coches que se tienen que quedar parados hasta un mínimo del 25% del total.
En cuanto a la operativa semanal, se trabaja en eliminar el día fijo de libranza y cambiarlo por un sistema de rotación de descansos para que los taxistas no se vean perjudicados ya que unos días son más productivos que otros y que incluso puedan llegar a juntar descansos.
Otra vía en la que se está trabajando para flexibilizar la operativa de los taxis es en dar vía libre al concejal de movilidad para que decrete de un día para otro libertad de horarios y de trabajo (que puedan salir todos los taxis hasta 22 horas) en los días de pico de actividad, como durante la celebración de ferias o festivales.
Momentos de alta de demanda en los que es imposible encontrar un taxi y que los vehículos de Uber y Cabify aprovechan para disparar los precios.
Más allá de ampliar los horarios del taxi, el ayuntamiento está trabajando en un sistema de fijación de precios que les permita a los taxistas competir con la tarifa dinámica de Uber en momento de baja demanda y en la eliminación de ciertas limitaciones.
La aplicación Free Now ya ofrece un precio cerrado. El objetivo es que todos los taxis puedan ofrecer una tarifa cerrada cuando se les contrata por un medio telemático y que se establezca un algoritmo para establecer una tarifa máxima del trayecto y que, con ella como referencia, el taxista pueda ofrecer precios más altos o más bajos en función de la demanda.
Apoderarse del transporte público en connivencia
Según el documento S1 de Uber, apoderarse del servicio público es una de sus metas.
«Creemos que podemos seguir aumentando el número de viajes realizados con nuestros productos de Ridesharing y reemplazar la propiedad y el uso del vehículo personal y el transporte público, incluso mediante la inversión continua en nuestras opciones de viaje compartidas asequibles, como Uber Bus y Express POOL«.
Los planes de Ayuntamiento de Madrid para la regulación del taxi están en línea con las demandas de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia.
José María Marín Quemada, presidente de la CNMC ha vuelto a atacar al sector del taxi en un «sin sentido». Ha impugnado el Reglamento del Área Metropolitana de Barcelona y ha cargado contra la normativa madrileña.
Martinez-Almeida sigue sin regular los VTC
