Irán ejecuta a un periodista disidente por inducir a las protestas de 2017
Irán ha ejecutado a un periodista por su papel en la inspiración de protestas económicas a nivel nacional en 2017, un año después de que fuera capturado en el exilio por el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria del país.
La televisión estatal iraní y la agencia de noticias estatal IRNA dijeron que Ruhollah Zam, de 47 años, fue ahorcado el sábado por la mañana. Los informes no dieron más detalles.
En junio, un tribunal condenó a muerte a Zam, diciendo que había sido condenado por «corrupción en la Tierra», un cargo que se utiliza a menudo en casos de espionaje o intentos de derrocar al gobierno de Irán.
El sitio web de Zam, AmadNews, y un canal que creó en la popular aplicación de mensajería Telegram, habían difundido las protestas y la información vergonzosa sobre funcionarios que desafiaban directamente la teocracia chií de Irán.
Esas manifestaciones, que comenzaron a fines de 2017, representaron el mayor desafío para Irán desde las protestas del Movimiento Verde de 2009 y prepararon el escenario para disturbios masivos similares en noviembre de 2019.
La chispa inicial de las protestas de 2017 fue un aumento repentino en los precios de los alimentos. Muchos creen que los opositores de línea dura del presidente de Irán, Hassan Rouhani, instigaron las primeras manifestaciones en la ciudad conservadora de Mashhad en el noreste de Irán, tratando de dirigir la ira pública contra el presidente.
Pero a medida que las protestas se extendieron de pueblo en pueblo, la reacción se volvió contra toda la clase dominante.
Pronto, los gritos que desafiaban directamente a Rouhani e incluso al líder supremo, el ayatolá Ali Khamenei, se pudieron escuchar en videos online compartidos por Zam. Su canal también compartió horarios y detalles organizativos de las protestas.
Telegram cerró el canal por las quejas del gobierno iraní de que difundía información sobre cómo fabricar bombas de gasolina. El canal continuó más tarde con un nombre diferente.
Zam, quien dijo que huyó de Irán después de ser acusado falsamente de trabajar con servicios de inteligencia extranjeros, negó haber incitado a la violencia en Telegram en ese momento. Según los informes, las protestas de 2017 terminaron con unas 5.000 personas detenidas y 25 asesinadas.
En octubre de 2019, el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria de Irán dijo que había atrapado a Zam, a quien se le había dado asilo en Francia y tenía su base en París, en una «operación compleja que utiliza el engaño de inteligencia». No dijo dónde tuvo lugar la operación.
Zam fue una de las varias figuras de la oposición en el exilio que han sido devueltas a Irán durante el último año.
Francia había criticado su sentencia de muerte como «un duro golpe a la libertad de expresión y la libertad de prensa en Irán».
Zam apareció en una serie de confesiones televisadas a principios de este año, en las que se disculpó por sus actividades pasadas.
Durante una entrevista en julio, dijo que había perdido unos 30 kilos desde su arresto.
Zam es hijo de un clérigo chiíta reformista que una vez ocupó un puesto de política gubernamental a principios de la década de 1980. Mohammad Ali Zam escribió una carta publicada por los medios iraníes en julio de 2017 en la que dijo que no apoyaría a su hijo por los informes de AmadNews y los mensajes en su canal de Telegram.
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