Una Policía Nacional se infiltró durante 2 años en el movimiento por Palestina y la izquierda independentista
Un nuevo caso de un agente de la Policía Nacional infiltrado en movimientos políticos y sociales de Catalunya ha salido a la luz. Según ha informado La Directa, una Policía Nacional de 26 años se habría infiltrado durante dos años en el movimiento por Palestina y en la izquierda independentista.
De acuerdo con el medio digital, la mujer habría militado en la Comunidad Palestina de Catalunya, Endavant y en el Casal Popular 3 Voltes Rebel. Además, participó en las protestas contra la sentencia del Procés en otoño de 2019.
La agente utilizó un DNI falso y también se inscribió en un programa de la entidad Novact, financiado por la Generalitat de Catalunya.
Salida de Barcelona y mantenimiento del contacto
Aunque dejó Barcelona a finales de 2020, justificando su marcha por un cambio de destino en su supuesto trabajo de comercial y la delicada salud de su madre, mantuvo el contacto telefónico con activistas hasta 2023.
Según la información publicada, en octubre de 2018, la mujer se presentó como hija de un padre de origen palestino, alegando interés en el movimiento. De este modo, logró integrarse y sumarse a la Prou Complicitat amb Israel.
Durante los más de dos años de infiltración, participó activamente en las movilizaciones contra la sentencia del Procés en 2019. No solo contaba con un DNI falso, sino que realizaba transferencias bancarias y pagos por Bizum desde una cuenta abierta en Trio.
Una Policía Nacional, infiltrada tres años en movimientos sociales de Girona
Uso de una identidad falsa
Como miembro de la Comunidad Palestina, en febrero de 2019, participó en Rizoma, un programa de liderazgo y transformación social enfocado en la prevención de extremismos violentos, impulsado por Novact con el apoyo de la Agencia Catalana de Cooperación al Desarrollo (ACCD) de la Generalitat de Catalunya.
La mujer habría formado parte de la 32ª promoción de la Escuela de Policía de Ávila, graduándose y jurando bandera en junio de 2018. A pesar de haberse marchado de Barcelona a finales de 2020, mantuvo contacto con los activistas hasta 2023.