Tito Álvarez denuncia a Uber por defraudar a Hacienda 5 millones de euros
La Asociación de Presión Taxi Project 2.0 ha presentado una denuncia ante la Fiscalía de Delitos Económicos contra la empresa Uber por un delito contra la hacienda pública y otro de falsificación de documentos.
Los denunciantes, representados por el despacho Vosseler Abogados, consideran que Uber usó un entramado societario para eludir el pago de impuestos y que, a partir de un informe de la consultora Ekona, supuestamente se dejó de tributar en España gracias a su ingeniería fiscal.
La letrada Leire López, de Vosseler Abogados, ha asegurado a través de una rueda de prensa virtual que la empresa no declara como servicio de transporte sino de aplicación y transmisión de información y que son los conductores los que deben declarar los impuestos por su actividad económica equiparándose a taxistas.
Para la letrada, hay sentencias de tribunales de Unión Europea que detalla que la actividad de Uber es el transporte de pasajeros y que debe tributar por los viajes.
Además, la letrada detalla que de cada servicio la empresa cobra entre 20 y 30% al usuario por la aplicación informática y que esta cantidad «se desvía a Uber Holanda y de ahí a paraísos fiscales», como Singapur, países caribeños o el estado de Delaware en Estados Unidos, por lo que «de ese porcentaje no se está tributando ni Impuesto de Sociedades ni IVA».
Los denunciantes detallan que han analizado el ejercicio de 2018 de Uber y que le sale una presunta cuota defraudada de 5,1 millones de euros aunque, consideran que la cantidad puede ser mayor si se tiene en cuenta que la empresa empezó operar en 2014 en España.
Por su parte, el coordinador de Taxi Project 2.0 y portavoz de Élite Taxi, Tito Álvarez, considera que se están defraudando millones de euros al Estado en un momento económico delicado por la crisis sanitaria.
El informe económico en el que se basa la denuncia presentada «analiza y describe el modelo de negocio, la estructura societaria y sus prácticas tributarias, concluyendo que, en su opinión, Uber basaría su estrategia empresarial en la evasión fiscal».
Por eso, se acusa a varios administradores y empresas relacionadas con este servicio de transporte.
Consideran que «el entramado societario de Uber tiene por objeto la defraudación tributaria a través de la simulación de operaciones intracomunitarias inexistentes», a partir del pago por el desplazamiento y por el uso de la aplicación, una parte que supuestamente no tributan, dentro del mismo servicio.
En este sentido detallan que «su cuenta de resultados no refleja la realidad de la actividad del grupo Uber en España, por lo que prácticamente no paga impuestos a la Hacienda española, dado que sus beneficios declarados son casi inexistentes».
El informe remarca que en 2017 «la filial española declaró beneficios por solo 163.514 euros a pesar de que los ingresos declarados fueron de 2,9 millones de euros, abonando en concepto de Impuesto de Sociedades tan solo 53.817 euros» y añade que en el ejercicio 2018, «Uber Systems Spain, S.L. declaró unos ingresos de 16,7 millones de euros y un beneficio de apenas 979.914 euros, abonando 325.380 euros en concepto de Impuesto de Sociedades».
Tito Álvarez denuncia a Uber por defraudar a Hacienda 5 millones de euros