Multa de 5 millones a Glovo en Italia por violar la privacidad de los Riders

Italia sanciona a Glovo con 5 millones por violar la privacidad de más de 35.000 Riders

Italia ha impuesto una multa de cinco millones de euros a Glovo por infringir los derechos de privacidad de más de 35.000 trabajadores de su plataforma. La sanción se deriva de una investigación de un año realizada por la Autoridad Italiana de Protección de Datos, que encontró prácticas discriminatorias y una violación directa de las normativas laborales y de protección de datos europeas.

Uso indebido de datos personales

La investigación reveló que Foodinho SRL, filial de Glovo en Italia, realizaba un seguimiento constante de los repartidores, incluso fuera de sus horarios laborales. Además, la plataforma empleaba un sistema de puntuación de rendimiento oculto y compartía los datos recopilados con terceros sin el consentimiento de los trabajadores.

  • Geolocalización excesiva: Los datos de ubicación se rastreaban incluso cuando la aplicación estaba en segundo plano o inactiva. Hasta agosto de 2023, se seguía rastreando aunque la aplicación estuviera cerrada.
  • Invisibilidad de derechos: El sistema algorítmico no permitía a los repartidores recurrir decisiones automatizadas ni contar con intervención humana, en contravención al Reglamento General de Protección de Datos (RGPD).

Medidas exigidas por el regulador

Además de la multa, las autoridades italianas han requerido a Glovo implementar medidas correctivas, como:

  • Asegurar que las decisiones tomadas por algoritmos sean supervisadas por operadores capacitados.
  • Prohibir el uso de sistemas biométricos, como el reconocimiento facial, para verificar la identidad de los repartidores.

Reversing.Works: un esfuerzo pionero

La investigación contó con el apoyo de Reversing.Works, un colectivo especializado en ingeniería inversa para analizar el funcionamiento interno de plataformas digitales. Según Claudio Agosti, responsable del grupo, el caso de Glovo refleja un patrón más amplio en el marco del llamado «capitalismo de la vigilancia».

Reincidencia de Glovo

Esta no es la primera vez que Glovo se enfrenta sanciones por prácticas contrarias a la normativa:

  • Julio 2021: Italia multó a Foodinho con 2,6 millones de euros por incumplimientos similares.
  • Febrero 2023: La Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) sancionó a Glovo con 550.000 euros por no proteger adecuadamente la privacidad de sus empleados.

Implicaciones legales y mercado laboral

El historial de la compañía se agrava tras la sentencia del Tribunal Supremo en 2020, que determinó que los Riders eran falsos autónomos, obligando a la empresa a afrontar millones de euros en salarios atrasados. Además, la Comisión Europea investiga a Glovo y su matriz, Delivery Hero, por posibles prácticas de cartel en el mercado de reparto de comida a domicilio.

Uso de falsos autónomos

Este mismo mes de noviembre de 2024, un juzgado de Madrid determinó que Glovo contrató a 3.312 repartidores bajo un modelo de falsos autónomos entre 2015 y 2018. Esto implica que los repartidores deberían haber sido empleados con contrato laboral.

Esta sentencia se suma a otras resoluciones similares del Tribunal Supremo, que ya había considerado que Glovo debía reconocer a los repartidores como trabajadores asalariados.

Denuncia penal por explotación laboral

En junio de 2024, la Fiscalía de Barcelona presentó una denuncia penal contra Glovo por violar los derechos de sus trabajadores. Acusó a la empresa de utilizar su modelo de negocio para evadir obligaciones laborales, como la cotización a la Seguridad Social y el pago de salarios justos​.

Querella criminal contra los derechos de los trabajadores

Oscar Pierre, consejero delegado y cofundador de Glovo, fue citado para comparecer ante el juzgado número 31 de Barcelona el próximo 3 de diciembre, en relación con un presunto delito contra los derechos de los trabajadores. Aunque su declaración estaba prevista inicialmente para septiembre, fue aplazada, la magistrada María Isabel Hernando acordó el pasado mes de octubre volver a citarlo a solicitud de la Fiscalía.

Pérdidas de 2.300 millones y acumulación de 400 millones en multas

La propietaria de Glovo, Delivery Hero, ya rebajó el valor de la empresa en 508 millones ante la oleada de multas y querellas admitidas a trámite, reconociendo en los resultados del primer semestre que podría enfrentarse a multas y reclamaciones de Hacienda y la Seguridad Social en España por un importe de entre 200 y 400 millones de euros por la utilización como repartidores de falsos autónomos.

La multinacional registró pérdidas en 2023 por un importe de 2.305 millones, frente a los 2.975 millones de 2022. La Comisión Europea multó a la empresa con 400 millones de euros por prácticas anticompetitivas.

En junio de 2020 Yolanda Díaz se reunió con UATAE y con RidersxDerechos, presentó el proyecto de ley para que los mensajeros fuesen considerados asalariados y no autónomos. A partir de ahí, en octubre de ese mismo año vino la primera de las sanciones: 16 millones de euros de la Seguridad Social.

En 2021 Glovo abandonó la CEOE una vez aprobada la Ley Rider y Deliveroo, directamente abandonó el país, pero Glovo siguió desde entonces utilizando a los trabajadores como falsos autónomos, lo que le ha valido sanciones millonarias tras las inspecciones de trabajo y querellas interpuestas.