Mueren cuatro jóvenes atropellados por un tren en Montmeló, Barcelona

Fallecen cuatro jóvenes arrollados por un tren en Montmeló, Barcelona, al cruzar las vías

Hacia las ocho y media de la tarde de este domingo, un grupo de siete personas pasó las vías por un punto no autorizado y donde, según el alcalde de Montmeló, Pere Rodríguez, lo hicieron a pesar de que les habían indicado el camino correcto.

En declaraciones a «La mañana de Catalunya Ràdio», el alcalde ha asegurado que los jóvenes habían recibido indicaciones:

«Se les indicó que debían continuar por la acera para ir hacia el paso subterráneo, pero en algún momento ellos decidieron hacer atajo. Cogieron un pequeño camino de tierra que no está ni señalizado ni iluminado y, siguiendo éste camino, llegó un momento que vieron la vía del tren y quisieron cruzar. Pero es un lugar que no es nada natural ni para ir al circuito, ni para ir al concierto, ni para ir a ninguna parte.»

Los jóvenes pasaron cerca de una curva con visibilidad reducida. Sólo unos 50 metros más arriba del punto por donde atravesaron hay un puente habilitado para atravesar las vías. Y también cerca hay un paso subterráneo.

Aunque la infraestructura ferroviaria queda protegida por una valla perimetral al paso por una zona donde hay viviendas, los jóvenes accedieron por un punto en el que termina el cerramiento y donde hay camino de tierra de unos 50 centímetros de ancho.

Con motivo del festival de música tecno DURO II, que atrajo a más de 15.000 personas, este domingo se organizó un dispositivo con un acceso delimitado y con personal informador y de control de acceso, según remarcó el alcalde.

Tras la tragedia, el jefe del gobierno municipal afirmó que la hipótesis era que los jóvenes se habían perdido. «Creemos que no sabían a dónde iban, con la mala suerte de que ha llegado el tren y se los ha arrollado», afirmó tras el atropello.

Las víctimas eran de Barcelona y Madrid

Las cuatro víctimas mortales formaban parte de un grupo de amigos provenientes de Barcelona (dos chicas) y Madrid (un chico y una chica), según ha informado el Ayuntamiento de Montmeló.

Las otras tres personas del grupo de siete que cruzaron la vía tuvieron que trasladarlas al Hospital de Mollet con una crisis de ansiedad.

Montmeló ha decretado tres días de luto y ha convocado un minuto de silencio en la plaza Rafael Casanova, en el que han participado el alcalde, la presidenta del Parlament, Anna Erra, la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, y el consejero de Salud, Manel Balsells.

Lo que se había concebido como una ofrenda floral por el 11S en la que debía recordarse los 50 años del golpe de estado en Chile ha sido un momento de recuerdo para las víctimas tanto del terremoto de Marruecos como del atropello.

«No se pueden prever desgracias de este tipo, pero, cuando ocurren, lo que importa es la parte humana», ha afirmado el alcalde, que ha agradecido el apoyo recibido por parte de las distintas administraciones. Pere Rodríguez ha añadido que este mediodía todavía se estaba contactando con las familias de los difuntos.

El maquinista del tren que embistió a los jóvenes dio negativo en el control de alcoholemia. Los 170 pasajeros que iban al convoy tuvieron que esperar más de dos horas dentro, hasta las 11 de la noche, hasta que finalmente pudieron terminar el trayecto hasta Vic.