Cómo las grandes corporaciones explotan al pequeño comercio

Cómo las grandes corporaciones explotan al pequeño comercio



Las grandes compañías quieren que sepas cómo les importa el pequeño comercio (En tanto no compitan con ellos o les causen problemas).

Durante la pandemia esas compañías reclamaban la atención sobre el modo en que apoyaban a los pequeños emprendedores. Uber enfatizaba su ayuda a los restaurantes.

Ahora que la economía entrará en rebote ya tienen su planificación para su poderoso interés comercial a través de salarios, regulaciones y contrataciones a conveniencia, pero mostrándolas ideales también para el pequeño comercio. Un punto en común, aunque sea debilitando y quitando competitividad al pequeño.

El tema es que el comercio de cercanía ya está desde hace tiempo en desventaja por más que las grandes corporaciones invoquen a los intereses comunes principalmente por mantener su status de liderazgo con pretensiones altruistas para mejorar la visión general de su marca. Estrategias de mercado con el as del capital en la manga para sostener al poderoso.

Pero es que además ejercen de portero de discoteca colocando una barricada como control a través de su dominio en Internet y en sus tarifas para poder anunciarse y relacionarse con la nueva clientela que remite sus datos a través de continuos «he leído y acepto las condiciones» que revienta la competencia a través del engaño trilero sistemático.

Ellos aseguran que gracias a su tecnología existen, aunque de hecho ahora son sus amos.

Pequeñas empresas a merced de Facebook o Google. Un cártel que controla los mercados a través de Internet prácticamente en exclusiva. Tenemos cuatro compañías al mando de los restaurantes que ponen su trabajo a sus órdenes: Uber Eats, Postmates, GrubHub y DoorDash.

Los pequeños emprendedores pagan sus tarifas y cumplen órdenes. Los bancos saben a quién apoyar. Y se cierran a otras salidas.

Estas grandes compañías marcan las reglas e imponen sus propias regulaciones dictándoles a los Estados sus condiciones. Son monopolios que dirigen pseudo privados Gobiernos.

La clave es «crece tan rápido y grande como puedas» y serás el portero que marque quién entra al Studio 54 y baila. Es bueno acudir con sonrisa y conocer al Chuarchenegger en el control.

Se trata de amar al pequeño comercio porque no hay mejor marketing.

El mantra es llamarlo «El corazón de la nación», «la parte esencial de nuestra comunidad». La realidad es que eres parte obediente del monopolio o serás fagocitado.

Toca ser inteligentes y valorar tu capacidad para enfrentarte al monstruo.

Ellos esperan el momento oportuno para arramblar con todo. Nosotros somos la resistencia.

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