El Gobierno abre la puerta al cese de Rubiales tras negarse este a dimitir
Luis Rubiales se niega a dimitir como presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Ni la presión de prácticamente todos los grupos políticos del Congreso, ni las palabras de Pedro Sánchez, ni el amplio rechazo social son suficientes para que se plantee la dimisión. Por eso, desde el gobierno ya se abre la puerta a una inhabilitación que comporte su cese.
De entrada, hay que tener en cuenta que la RFEF no es una institución pública y, por tanto, no es tan fácil cesar a su presidente. Pero hay una fórmula que sí podría acabar con la presidencia de Rubiales y el ejecutivo estatal ya dice abiertamente que la pondrá en marcha si no hay un cambio de rumbo voluntario del dirigente canario. Victor Francos, presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), decía este martes por la noche en entrevistas a la Ser y en RAC1 planteaba la manera de hacerlo.
Dones Progressistes piden la dimisión de Rubiales por el beso a Jenni Hermoso
Si de la asamblea extraordinaria que ha convocado Rubiales para este viernes no sale una dimisión, el CSD se reunirá en los próximos días, realizará un «análisis jurídico» de la situación y decidirá si eleva el caso al Tribunal Administrativo del Deporte (TAD). Es este órgano quien puede determinar si la actuación de Rubiales, en el polémico beso forzado a Jennifer Hermoso, ha cometido una infracción por la que merece ser inhabilitado.
El CSD actúa porque ya ha recibido al menos tres denuncias contra la actuación de Rubiales este pasado domingo. La primera la presenta Miguel Galán, presidente del Centro Nacional de Formación de Entrenadores de Fútbol; la segunda es de Xavier Estrada Fernández, ex árbitro y actual concejal de ERC en el Ayuntamiento de Lleida; y la última ha sido la de Sumar. Si el expediente es aceptado por el TAD, incluso el CSD podría apartar a Rubiales de forma provisional.
