El arzobispado de Tarragona suspende a un cura por abusos sexuales durante 15 años
El caso de abusos sexuales cometido por parte del cura Manuel M. Fuentes que el mismo arzobispado de Tarragona llevó ante la fiscalía el pasado mes de febrero, tendrá consecuencias internas. Así lo ha asegurado el mismo ente en un comunicado, que detalla que se le ha suspendido durante 15 años de sus responsabilidades pastorales.
El arzobispo Joan Planellas ha impuesto, de acuerdo con la Santa Sede, una serie de sanciones levantando pues la prescripción canónica. Dado que los hechos denunciados están prescritos por la vía civil, el órgano eclesiástico ha optado por sus propios canales para deshacerse de Fuentes, con la prohibición durante un año del ejercicio público del ministerio presbiteral y de la docencia eclesiástica. Además, durante quince años no tendrá voz y voto como canónigo en el Capítulo.
En el sentido de sus responsabilidades pastorales, sólo podrá ser nombrado adscrito en una parroquia, comunidad u organismo diocesano con la prohibición expresa de estar con menores de edad sin la presencia de un adulto.
Al mismo tiempo, el arzobispo Planellas ha exhortado al cura sancionado a «ponderar su comportamiento y a asumir el firme propósito de llevar una vida de acuerdo con la dignidad que corresponde a su ministerio presbiteral y a considerar la manera más oportuna de pedir perdón a la víctima».
El arzobispado de Tarragona, en el mismo comunicado, reafirma «su condena ante todo abuso sexual, de poder y de conciencia, especialmente cuando haya sido cometido por un clérigo contra un menor», e invita a «denunciar estos hechos a las autoridades civiles y a la Comisión de Prevención de los Abusos del Arzobispado (tel. 628 426 853, o oficina.abusos@arqtgn.cat)».
La oficina de abusos del arzobispado habló con el cura a principios de este año por una denuncia contra el, que terminó reconociendo los hechos. Al menos hay constancia de dos víctimas, un chico de 18 años y un menor, ambos hijos de familias con quien el rector tenía una buena relación.
Uno de los casos habría pasado en el monasterio de Santes Creus cuando Fuentes era el rector. El cura habría invitado a un chico de 18 años recién cumplidos y éste se habría encontrado que tenía que dormir en la misma cama del presbítero. La víctima relató que el cura hizo tocamientos, que se masturbó a su lado y que al día siguiente le pidió que no explicase nada a nadie.
La víctima, después de explicarlo a la pareja y a un amigo, se lo dijo a los padres, y llegaron a entrevistarse con el entonces arzobispo Lluís Martínez Sistach, el cual se habría limitado a pedirles que rogaran. Según el, ante otro caso denunciado 20 años después en relación a un menor, la respuesta del arzobispado de Tarragona también fue tapar los hechos. Cuando el actual arzobispo, Juan Planellas, activó el protocolo interno y comprobó que no había nada documentado sobre los hechos, decidió llevar el mismo el caso a la Fiscalía.
El arzobispado de Tarragona suspende a un cura por abusos sexuales durante 15 años