La UE acuerda reducir el consumo de gas a medida como quería España
Este martes los responsables de energía de los gobiernos de los 27 países miembros de la Unión Europea, reunidos en Bruselas, han llegado a un acuerdo sobre la crisis del gas.
Ha sido un consejo extraordinario de urgencia y, según la presidencia semestral de la República Checa, se ha resuelto con «un acuerdo político»:
«¡No era una misión imposible! Los ministros han llegado a un acuerdo político sobre la reducción de la demanda de gas antes de que llegue el invierno.»
🔋 #TTE Energy | 👏 This was not a Mission Impossible! Ministers have reached a political agreement on gas demand reduction ahead of the upcoming winter.#EU2022CZ pic.twitter.com/XBnKuTs75W
— EU2022_CZ (@EU2022_CZ) July 26, 2022
Ribera: «Significativamente por debajo» del 15%
Por el momento no se conocen los detalles del acuerdo, pero parece que será diferente de lo que propuso la Comisión Europea, la CE, el miércoles de la semana pasada, para que los países redujeran el consumo de gas un 15% de forma obligatoria si era necesario.
Y que irá en la línea de lo que reclamaron países como España y Portugal, que rechazaron que todos los países tuvieran que hacer el mismo esfuerzo de ahorro de gas, y que pidieron que hubiera excepciones.
En este sentido la ministra española de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha llegado a la reunión afirmando que apoyará el plan que se acuerde ahora:
«Pienso que veremos un acuerdo, todos entendemos que cuando alguien pide ayuda, debemos responder. La ayuda puede tomar formas diferentes, pero el espíritu de colaboración prevalecerá».
«Tendremos un objetivo de reducción, no del 15%, sino significativamente por debajo, lo que debemos hacer es combinar las distintas medidas de solidaridad, que no se limitan sólo al ahorro neto.»
España quiere un trato diferenciado
El objetivo de Ribera era que el acuerdo final no fuera una reducción igual para todos los países, sino que exista un trato diferenciado acorde con la situación de cada uno.
En este sentido, ha defendido que la reducción de consumo sólo tiene sentido si el gas ahorrado se puede llevar a otros países, lo que no siempre es posible por falta de conexiones:
«De poco sirve que uno ahorre un 15% del gas si después no puede transferir estos recursos a otros países».
Ribera elogió que la República Checa, que preside la UE actualmente, haya escuchado las reclamaciones de España y haya hecho una propuesta acorde con estas reclamaciones.
La intención era que esta cumbre sirviera para mostrar la unidad de acción de los países miembros y para evitar la división, algo que se hubiera considerado un regalo para Rusia, al que se responsabiliza de la crisis.
El gas ruso, que no llega
La crisis sale de las consecuencias de las medidas de la UE contra Rusia por la invasión de Ucrania, y de la fuerte posibilidad de que, como represalia, el gas ruso deje de llegar a Europa.
El suministro a través del gasoducto Nord Stream 1 se redujo al 40% en junio, pero la alarma saltó hace 15 días, cuando se cortó por completo por trabajos de mantenimiento.
El motivo es que el gobierno de Vladimir Putin sugirió varias veces que podría no volver a abrirse el paso del gas, aduciendo razones técnicas, no políticas.
Plan de ahorro cuestionado
La CE propuso el plan de ahorro del 15% el miércoles 20, un plan voluntario pero con la intención de convertirlo en obligatorio si los países miembros no cumplían.
El gobierno, por boca de Ribera, reaccionó radicalmente en contra calificándolo de «sacrificio desproporcionado» y asegurando que en ningún caso se cortaría el gas en los hogares, algo no previsto en el plan de la CE.
Rusia reabrió al día siguiente el Nord Stream 1, pero manteniendo el 40% de suministro, y este lunes lo ha reducido al 20%, con el argumento de que falta una turbina que se estaba reparando en Canadá y no acaba de llegar.