Se desploma el precio del petróleo por el Coronavirus
Los efectos económicos del coronavirus continúan sacudiendo las bolsas. Esto también afecta al precio del petróleo, que no para de desplomarse.
En el arranque del lunes los mercados asiáticos han caído un 31%, una sacudida que no se veía desde que en 1991 los Estados Unidos iniciaron la llamada tormenta del desierto para retirar Irak de Kuwait.
La caída, sin embargo, se ha ido moderando hasta situarse en torno al 25% . Esto sitúa el precio del barril de Brent, el de referencia en Europa, en 34 dólares, el nivel más bajo desde 2016.
Todo ello pasa por la frenada de la demanda derivada de las medidas preventivas para combatir el coronavirus. También lo ha ocasionado el enfrentamiento entre Rusia y Arabia Saudí, que se evidenció en el fracaso de la reunión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) el pasado viernes, que pretendía recortar la producción con el objetivo de contener los precios.
La negativa de Rusia ya hizo que los precios cayeran el viernes, y esta madrugada, con la apertura de los mercados asiáticos, ha continuado la caída.
El precio actual de 34 dólares es la mitad del que tenía el barril de Brent al inicio de este año y similar al que tenía en 2008 después de que estallara la crisis financiera.
Las bolsas siguen bajando
Las bolsas del Golfo Pérsico se han hundido. El índice principal de Kuwait y de los Emiratos Árabes Unidos ha llegado al 9,5%, los efectos negativos del coronavirus también se han dejado sentir en Dubai (9%) y en Abu Dabi (7,1%).
En Japón, el índice Nikkei cayó un 5%. Ha comenzado con pérdidas y ha llegado a descender hasta un 6,15%, antes de recortar determinadas pérdidas.
Precisamente en Japón, este lunes han comenzado unas nuevas restricciones a la entrada de viajeros procedentes de la China y Corea del Sur, con el objetivo de contener la propagación del coronavirus.
Hasta finales de mes, todas las personas que lleguen al territorio nipón desde los dos países vecinos deberán someterse a una cuarentena de dos semanas.
La crisis también afecta negativamente el transporte aéreo
Los aviones han perdido buena parte del pasaje pero a menudo siguen volando vacíos. Los contratos entre las compañías aéreas y los aeropuertos establecen la obligación de programar el 80% de los vuelos pactados.
Para no perder el contrato, las compañías mantienen los vuelos previstos aunque vayan vacíos, sin ningún pasajero.
De modo que se trabaja y se quema combustible para nada.
Se desploma el precio del petróleo por el Coronavirus
