La importancia de la velocidad de Internet

La conexión a internet en el hogar se ha convertido en algo imprescindible, aunque no solo en los hogares, sino también en los pequeños negocios o en las empresas. Es por este motivo que contar con una buena velocidad en la transmisión de datos se ha vuelto algo fundamental.

La rapidez en la conexión a internet es un pilar fundamental, sobre todo por la cantidad de tiempo que nos ahorramos en transferir la información, aunque también para el correcto funcionamiento del software que se instala en la web y la eficacia de aplicaciones empresariales.

Básicamente, la velocidad de internet es la capacidad de rendimiento con la que cuenta nuestra conexión a internet. Con una buena velocidad de conexión se hace posible el intercambio de datos entre la red global (o mejor dicho, la gran red global) y nuestros dispositivos.

En la era de la información y la digitalización en la que nos encontramos, la velocidad de internet es algo que se ha vuelto crucial para muchos aspectos importantes, como la educación, la salud, el trabajo, el entretenimiento y la comunicación. Las escuelas dependen de Internet para la enseñanza a distancia y la investigación en línea. Los profesionales utilizan plataformas de videoconferencia para colaborar y trabajar de manera remota, mientras que los servicios de atención médica en línea y las teleconsultas han cobrado un nuevo significado después del mundo post-pandémico.

El entretenimiento en línea, incluido el streaming de vídeo y música, requiere tener una conexión a alta velocidad para disfrutar sin interrupciones. Además, las redes sociales y las aplicaciones de mensajerías se han convertido en herramientas vitales para mantenerse en contacto con amigos y familiares de todo el mundo.

A lo largo del artículo se comentarán los tipos de velocidad de fibra existentes y cuál es el que se debería de contratar en cada hogar u empresa dependiendo de las circunstancias y usos que cada uno haga del servicio de internet.

¿Qué velocidad de fibra necesito?

La mejor manera para descubrir cuál es la velocidad de internet que demanda tu hogar, es ver de forma aproximada la velocidad que demandan las actividades que realizas a través del internet, ya sean laborales o de ocio.

Otro aspecto que debes considerar es el número de dispositivos que se van a conectar al mismo tiempo a la red WiFi, ya que esto puede afectar a la carga y descarga de algunas funciones.

Todo lo que debes considerar para saber qué velocidad de fibra necesitas:

  1. Analizar tu consumo. Para saber qué velocidad necesitas en tu hogar es importante que analices el consumo de internet que haces. Es muy importante saber cuántos dispositivos se suelen conectar a esa red y qué actividades se llevan a cabo con esa conexión, ya que no es lo mismo usar internet para realizar compras online que para teletrabajar o ver y hacer streaming.
  1. Elegir si se quiere fibra óptica simétrica o no. La mayoría de operadores hoy en día ofrecen fibra óptica simétrica, esto quiere decir que cuenta con la misma velocidad de subida que de bajada, pero hay compañías que no lo hacen o incluso que sólo está disponible en algunas zonas. Si se puede, optar por fibra óptica simétrica es la mejor opción.
  1. Compara las propuestas de los distintos operadores. Cuando vas a contratar internet en casa, es primordial que compares todas las tarifas que sean de interés y veas los distintos tipos de velocidades y precios que ofrece cada compañía.
  1. Acuerdos de permanencia. Igual que la velocidad y el precio son aspectos muy importantes a considerar, la permanencia impuesta por las compañías también lo es. La gran mayoría de las operadoras fija permanencia de 12 meses, y si te vas antes de tiempo, tendrás que pagar una sanción económica.
  1. Observar si además del internet, se quiere contratar otro producto (como líneas móvil, por ejemplo). Es extraño ver tarifas de fibra sin que éstas vengan acompañadas de algún extra como una línea fija, móvil o incluso televisión. Si no te interesa nada más, vas a tener que buscar una compañía que no ofrezca estos servicios adicionales. Si esto te interesa, te saldrá más económico contratarlo con paquetes de este tipo.

Tipos de velocidad de fibra

La oferta de fibra óptica más barata hace algunos años atrás era la que ofrecía una velocidad de 50 Mb, aunque en la actualidad esta velocidad es muy escasa, por lo que ha pasado a estar completamente obsoleta.

Lo más probable es que los usuario que tuvieran este tipo de tarifa contratada, hayan observado que se han modificado sus tarifas y se ha aumentado su velocidad de conexión. Hoy en día hay muy buenas ofertas donde se puede contratar el doble de velocidad a unos precios muy económicos.

  • Fibra óptica de 100 Mb. El consumo que de internet que puedes hacer con esta velocidad no es muy amplio, pero sí lo necesario si no sois más de una o dos personas en la vivienda y ambas utilizáis el internet de manera escasa. Es apropiada para los hogares donde no suele haber más de 3 dispositivos conectados simultáneamente.
  • Fibra de 300 Mb o 600 Mb. Ambas velocidades permiten disfrutar de una buena conexión si teletrabajas, ves contenido en 4K o si pasas mucho tiempo jugando a juegos online. Es apropiada para aquellos que sean más de tres o cuatro personas en casa. Con la fibra de 300 Mb podrás tener hasta cinco dispositivos conectados a la vez, y con la fibra de 600 Mb podrás tener hasta 10.
  • Fibra óptica de 1GB. Este es la máxima velocidad de fibra que se comercializa. Suele ser más propio tener esta contratada en empresas, ya que un usuario particular no suele necesitarlo, a no ser que quiera conectar más de 1o dispositivos a la vez en su hogar y que con éstos realice muchísimas tareas.

¿Cómo sé que estoy recibiendo la velocidad que tengo contratada?

La fibra óptica garantiza que vas a recibir la velocidad real de lo que hayas contratado, y si ésta es simétrica (lo más común) no sería propio que notaras grandes diferencias entre la rapidez tanto de subida como de bajada de diversos contenido.

Si quieres asegurarte de estar recibiendo la velocidad que has contratado, tendrás que hacer un test de velocidad. Esta herramienta es gratuita y a penas lleva tiempo el realizarlo. Es capaz de ofrecerte un diagnóstico y ayudarte a ver si la pérdida de rapidez es tan notable como para que se deba a una incidencia o a problemas de conexión.