La iglesia no piensa devolver ninguno de los inmuebles apropiados
La Iglesia ha avisado al gobierno de Pedro Sánchez de que, de los cerca de 35.000 bienes inmatriculados por la institución que el ejecutivo le atribuye, hay un millar que no son suyos. Este millar, según los obispos, ya están inscritos a nombre de alguien, o bien no se han podido identificar. Ahora, esto deberá regularizarse en el registro.
Sin embargo, la Conferencia Episcopal no reconoce que se haya apropiado de fincas de manera indebida. Y tampoco está dispuesta a devolver su patrimonio inmobiliario, acumulado desde 1946, cuando una ley franquista reguló ese privilegio.
Se denominan bienes inmatriculados a las propiedades que se llevan por primera vez al Registro de la Propiedad. Desde 1998 a 2015, una ley del gobierno de José María Aznar permitió registrar a nombre de la Iglesia miles de bienes con el obispo como notario.
A raíz de un comunicado conjunto emitido entre el gobierno y la Conferencia Episcopal, se ha interpretado que se abría la puerta a devolver inmuebles, pero en una reunión posterior, los obispos han remarcado que no tienen previsto realizar ninguna devolución.
La confusión arranca de un listado que el gobierno hizo público hace un año y que recoge 34.961 bienes inmatriculados por la Iglesia. Ahora, revisado el listado de fincas, hay casi un millar que la institución no ha reconocido como suyas por motivos diversos.
En realidad, son una mínima parte de todas las que pusieron a su nombre amparada en una ley de la época de Aznar.
La iglesia no piensa devolver ninguno de los inmuebles apropiados