a comisaria de Energía, Kadri Simson

La Unión Europea, sin acuerdo para limitar el precio del gas, a pesar de que casi se ha duplicado en un año

La Unión Europea sigue sin ponerse de acuerdo para fijar un tope al precio del gas, pese a que casi se ha duplicado en el último año.

Si que hay consenso entre los ministros de Energía de los 27 para ponerle precio al que llega de Rusia, pero la Comisión Europea no quiere ser tan drástica con importadores como Noruega o Argelia, con los que prefiere negociar individualmente.

En la cumbre de este miércoles en Praga, se ha decidido que el próximo martes, 18 de octubre, Bruselas presentará la propuesta para intervenir en el mercado energético, que debe definir la fórmula para establecer un precio máximo. Sin embargo, siendo optimistas no se espera un acuerdo hasta principios de noviembre.

De ahí, Bruselas tampoco arroja la toalla en ninguna fórmula, incluso la de limitar los precios de compra de gas.

«Debemos actuar juntos y basados ​​en un amplio consenso», ha remarcado la comisaria de Energía, Kadri Simson, al llegar a la reunión. Terminada, indicó que la propuesta incluirá un «mecanismo temporal para limitar los precios» del gas, del que no se saben los detalles, y también la manera de «mitigar los riesgos que inevitablemente comportará».

«Durante el fin de semana veremos cómo podemos proceder con el tope al gas para la generación de energía, si hay una mayoría amplia de estados que lo apoyan», ha añadido Simson.

El plan incluirá además medidas legislativas para reducir la demanda y fomentar la solidaridad entre estados.


El G7 limitará el precio que se paga por el petróleo ruso

 

 

El G7 limitará el precio que se paga por el petróleo ruso

 


Acuerdo para comprar gas de forma conjunta

Donde sí han adelantado los titulares de Energía es en el acuerdo para hacer compras conjuntas de gas para así negociar precios más razonables. La medida se aplicaría a partir del próximo año, con la idea de que el invierno 2023-2024 será «más crítico» que el de este año.

También se ve con buenos ojos exportar al conjunto de la Unión la excepción ibérica, que desvincula el gas del sistema de fijación de precios de la luz.

La gran mayoría de ministros han expresado su apoyo a Bruselas en la búsqueda de soluciones para contener el precio del gas, con matices sobre cuestiones temporales.

Sólo el ministro húngaro, Peter Szijjarto, se mostró escéptico y pidió que no haya propuestas que puedan poner en riesgo el suministro de un estado miembro. Hungría no quiere medidas que limiten el precio del gas porque Rusia ha advertido de que, si los hay, cerrará el grifo.

El objetivo de los 27 es que los ministros discutan las propuestas formales en una cumbre el 25 de octubre en Luxemburgo y, en su caso, cierren la propuesta en otro consejo extraordinario a principios de noviembre en Bruselas.

El debate ocurre en un contexto de precios altos del gas. En el mercado de futuros, según el índice TTF de Ámsterdam, el de referencia en Europa y que Bruselas también quiere cambiar, se sitúa a 156 euros el megavatio-hora (MWh), menos de la mitad del pico del agosto, cuando alcanzó los 349 euros.