El Supremo confirma el 25% de castellano en las escuelas de Catalunya
El Tribunal Supremo ha rechazado el recurso de la Generalitat ante la sentencia del TSJC que obliga a impartir el 25% de las clases en castellano.
Esto significa que la sentencia del Tribunal Superior de 2020, que la Generalitat recurrió al alto tribunal, ahora es firme.
La providencia de la sala tercera del Supremo no entra en el fondo de la cuestión y argumenta que no había margen para presentar un recurso en el Supremo por las cuestiones planteadas.
Antes de recibir la comunicación del Supremo, los consejeros de Educación, Josep González-Cambray, y la consejera de Cultura, Natàlia Garriga, han comparecido de urgencia para mostrar el rechazo a la decisión.
Es una anomalía
González-Cambray ha lanzado un mensaje de tranquilidad a las escuelas. Ha recordado que la Ley de Educación de Catalunya ha sido declarada constitucional, ha defendido que el modelo de la escuela catalana es «integrador» y ha dicho que se quiere crear un problema donde no existe:
«No estamos ante un conflicto lingüístico, sino una acción de unos tribunales que toman decisiones desconociendo la realidad educativa de nuestro país».
El conseller ha lamentado que sea un juez «quien determine de forma arbitraria el porcentaje de horas necesarias para aprender una lengua» y ha añadido que esto «es una anomalía y representa un desprecio a nuestros profesionales de la educación».
González-Cambray ha explicado que se seguirá aplicando la LEC, que tiene un amplio consenso social y político.
De hecho, ha destacado que, desde el año 2005, sólo 80 familias han pedido la escolarización en castellano y ha dicho que las escuelas no deben cambiar nada, porque las pruebas constatan que los estudiantes salen sabiendo tanto castellano como catalán:
«Los centros educativos deben seguir trabajando como hasta ahora. No deben hacer ningún cambio en sus proyectos lingüísticos. No va de porcentajes. Va de pedagogía. Estamos hablando de la educación de nuestros niños y jóvenes y pido el máximo respeto al nuestro alumnado y profesionales del sistema educativo».
El conseller ha afirmado que tiene el compromiso de la ministra de Educación, Pilar Alegría, que se aplicará la LOMLOE, o ley Celaá, que reconoce al catalán como lengua vehicular.
«Me ha trasladado que darán cumplimiento a la LOMLOE, que dice que debemos garantizar desde Catalunya el aprendizaje de la lengua catalana y castellana. Y esto es lo que hacemos, hemos hecho y haremos», ha apuntado.
La decisión del Supremo viene de un recurso presentado en el 2015 por el Ministerio de Educación, en manos del PP, donde denunciaba inactividad de la Generalitat a la hora de garantizar que el castellano fuera también lengua vehicular en las aulas, tal y como establecía la llamada ley Wert, entonces en vigor.
El Supremo confirma el 25% de castellano en las escuelas de Catalunya