Puigdemont llega a Cerdeña para declarar ante el tribunal que estudia su extradición
Carles Puigdeont ha aterrizado en Cerdeña a primera hora de la mañana (ACN / Natalia Segura)

Puigdemont llega a Cerdeña para declarar ante el tribunal que estudia su extradición



El ex presidente de la Generalitat Carles Puigdemont ya está en Cerdeña, donde ha aterrizado esta mañana para preparar la vista de este lunes ante el Tribunal de Apelaciones de Sassari, que estudia la petición de extradición formulada por el juez Pablo Llarena.

Le acompaña Toni Comín, que ha viajado con él, y la también eurodiputada Clara Ponsatí, que llegó este sábado a Alguer y pasó el control de pasaportes.

El abogado de Carles Puigdemont, Gonzalo Boye, asegura que Puigdemont debería tener la inmunidad garantizada en toda la Unión Europea, incluido España. En declaraciones a Cataluña Radio, Boye ha alertado de que no se está cumpliendo la normativa europea y denuncia una persecución política:

«Ellos deberían tener garantizada en estos momentos su inmunidad de desplazamiento dentro del territorio del estado español y lo que no se está haciendo es cumplir con la norma europea. Lo que está haciendo España es entrar en un incumplimiento de normas europeas producto de una persecución política».

Por eso dice que puede pasar como con Polonia y Hungría, países a los que se han abierto procedimientos por incumplimiento de la norma europea y se han impuesto sanciones.

«El incumplimiento de las decisiones y las normas europeas comporta siempre la posibilidad de sanciones. Y aquí estaremos nosotros para exigir que sea una cosa o la otra. El cumplimiento sería lo ideal. Nosotros no creemos en la confrontación, pero en una confrontación inteligente, si no hay cumplimiento, deberá haber sanción. no hay ningún otro camino».

No habrá ningún tipo de orden inmediata

También coincide el abogado de Puigdemont en Cerdeña, Agostinoangelo Marras, que ha descartado que el Tribunal de Apelación de Sassari dictamine ninguna medida inmediata contra el ex en la vista de este lunes. Ni siquiera prevé ninguna medida cautelar.

Marras ha dado por hecho que Puigdemont podrá volver a Bruselas para hacer su trabajo en el Parlamento Europeo: «No hay ninguna posibilidad de cautelares».

El abogado ha dejado claro que cualquier decisión del tribunal puede ser impugnada en el Tribunal Supremo italiano y que con el simple hecho de interponer un recurso la decisión queda suspendida. Por lo tanto, dice, no habrá ningún tipo de orden inmediata: «Sólo al final del juicio el Supremo italiano dictará cuál será la suerte del ex presidente».

Marras explicó que hay un plazo máximo de aproximadamente dos meses para resolver el caso, ya que el Tribunal de Apelación de Sassari tendrá un máximo de 60 días para decidir. Luego habría cinco días para presentar recurso; un recurso que el Tribunal Supremo de Italia debería resolver en un máximo de diez días.

Puigdemont llega a Cerdeña para declarar ante el tribunal