Nadia Calviño, elegida nueva presidenta del Banco Europeo de Inversiones

La ministra Nadia Calviño será la presidenta del BEI

La vicepresidenta primera del gobierno, Nadia Calviño, presidirá el Banco Europeo de Inversiones (BEI) a partir del 1 de enero. Será la primera mujer que ocupa ese cargo.

Calviño era una de las candidatas a suceder al alemán Werner Hoyer al frente de la institución, junto a la danesa Margrethe Vestager –que ha abandonado temporalmente la vicepresidencia de la Comisión Europea–, el exministro italiano de Finanzas Daniele Franco y dos de los actuales vicepresidentes del BEI, la polaca Teresa Czerwinska y el sueco Thomas Östros.

La elección de Calviño, a propuesta de Bélgica –que ostenta la presidencia rotatoria de la entidad financiera–, se ha decidido este viernes en el Eurogrupo.

Sin acuerdo por las reglas fiscales

En el encuentro de los ministros de Economía y Finanzas de la UE también debía pactarse la reforma de las reglas fiscales, que deben marcar como la fiscalidad de los Estados para los próximos años.

Tras un debate de unas ocho horas que se prolongó más allá de las tres de la madrugada, los ministros no fueron capaces de cerrar un pacto.

Calviño ha explicado este viernes que durante las conversaciones de la noche se han realizado «progresos significantes» y se está «muy cerca» del acuerdo. Sin embargo, deja el acuerdo para «en los próximos días» y apuntó que, en caso necesario, la presidencia española convocará una reunión extraordinaria para poder cerrar el pacto.

¿Qué soportes tiene Calviño?

Calviño contaba con apoyos como los de Alemania y Portugal, que se han pronunciado públicamente a su favor.

Calviño ha defendido que el BEI es una institución «muy importante para Europa y para España» y ha augurado que lo seguirá siendo «en los próximos años», con la financiación de prioridades como la transición verde, el apoyo económico a Ucrania y el impulso del papel internacional del organismo.

Dos reveses anteriores

No es la primera vez que Calviño, que antes de ser vicepresidenta tuvo varios cargos en las instituciones europeas, aspiraba a liderar un organismo internacional. En 2019, los países europeos del G7 la propusieron para dirigir el Fondo Monetario Internacional, pero el gobierno acabó retirando la candidatura para buscar un consenso con el resto de países de la UE.

En 2020 estuvo muy cerca de presidir el Eurogrupo, pero en una votación muy ajustada, finalmente el elegido fue el entonces ministro de Finanzas irlandés, Paschal Donohoe.