Los manifestantes de Birmania dan rosas y botellas de agua a la policía
Decenas de miles de manifestantes salieron a las calles este sábado en la capital de Birmania, Rangún, para protestar contra el golpe militar, coreando consignas a favor de la democracia y entregando rosas rojas a la policía armada.
Se llevaron a cabo manifestaciones en ciudades de todo el país por segundo día en la mayor muestra de oposición vista desde la Revolución Saffron de 2007 que ayudó a lograr reformas democráticas.
Muchos activistas llevaban banderas rojas y ondeaban, globos y flores rojas, el color del partido Liga Nacional para la Democracia (NLD) de la líder electa encarcelada, Aung San Suu Kyi.
Los manifestantes también hicieron saludos desafiantes con tres dedos inspirados en la serie de películas Los juegos del hambre.
En la ciudad más grande, Yangon, los manifestantes pidieron la liberación de Suu Kyi y corearon: ‘¡No queremos una dictadura militar! ¡Queremos democracia!’
Frente a una línea de policías antidisturbios armados, les dieron a los oficiales botellas de agua y flores, en medio del temor de que pudiera resultar una represión sangrienta si las manifestaciones eran percibidas como violentas.
Cientos de manifestantes murieron durante el levantamiento de 1988 que llevó a Suu Kyi a la presidencia.
Pero el activista Thaw Zin, de 21 años, declaró ayer: ‘No queremos una dictadura para la próxima generación. No terminaremos esta revolución hasta que hagamos historia. Lucharemos hasta el final’.
El acceso a Internet se restableció después de que la junta gobernante impusiera un apagón de un día. Pero los militares no hicieron comentarios sobre las protestas y las noticias de la televisión estatal las ignoraron por completo.
Según los informes, la policía disparó balas de goma en medio de enfrentamientos en la ciudad sudoriental de Myawaddy. El historiador Thant Myint-U tuiteó:
‘Las protestas muestran todos los signos de ganar fuerza. Por un lado, dada la historia, podemos esperar que se produzca la reacción. Por otro lado, la sociedad de Myanmar actual es completamente diferente a la de 1988 e incluso de 2007. Todo es posible”.
Suu Kyi, de 75 años, ha sido detenida acusada de importar ilegalmente seis walkie-talkies. El ejército impuso el golpe de estado el lunes pasado, alegando que la victoria aplastante de la NLD en noviembre fue fraudulenta. Más de 160 personas han sido detenidas.
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