La victoria del Barça por 4-0 en Mallorca presenta a Messi y al invasor de campo
Lionel Messi anotó uno y marcó dos goles más cuando el Barcelona retomó donde lo dejó antes de un paro de tres meses por la pandemia del COVID-19, venciendo a Mallorca 0-4 para extender su ventaja en la liga.
Messi fue tan rápido y dominante como siempre a pesar de no haber jugado un partido desde principios de marzo.
No mostró signos de desaceleración por el dolor muscular en la pierna derecha que sufrió la semana pasada que puso en duda su regreso. Lanzó a los defensores del pasado con facilidad.
Messi y los otros titulares también se comportaron y jugaron normalmente en el campo, abrazados después de los goles de Arturo Vidal y Martin Braithwaite en la primera mitad y sin mantener las recomendaciones de distancia social durante los descansos.
El juego se jugó sin espectadores como parte de los protocolos de salud de la liga para limitar los riesgos de contagio, pero eso no impidió que un hombre invadiera el campo brevemente en la segunda mitad.
El hombre fue escoltado por seguridad después de que se las arregló para tomar una selfie a pocos metros de Jordi Alba de.
Messi asintió con la cabeza para que Braithwaite consiguiera su primer gol desde que se unió a Barcelona a mitad de temporada y dobló el primer partido de segundo minuto de Vidal. El delantero argentino ayudó a Alba antes de anotar solo en el tiempo de detención.
Una vez que Messi investigó al Mallorca amenazado por el descenso por sus debilidades, comenzó a enfrentarse a sus oponentes.
Messi regateó a cuatro defensores en una carrera por el centro del campo en busca de otro gol, antes de que el medio tiempo diera un respiro a los anfitriones.
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