La triste realidad de Leo, parapléjico después de robarle

La triste realidad de Leo, parapléjico después de robarle

El 25 de febrero de 2018 la vida de Leo fue truncada. El ciudadano español de origen peruano, volvía a su casa en bicicleta después del trabajo.

A 120 metros de su domicilio en la avenida del paralelo de Barcelona, 5 individuos lo atacaron, y uno de ellos le pegó en la cabeza con una barra de hierro.

Leo Higa, 37 años de edad, de profesión cocinero, feliz padre de una niña de apenas 4 meses.

Al día siguiente partía para Ibiza con su pareja para seguir haciendo lo que más le gustaba, cocinar.

Pasada la 1 de la mañana y como aún no había vuelto a casa, Virginie, -su pareja- le llamó, al otro lado contestó el Hospital Clínic de Barcelona.  Al colgar se comunicó de inmediato con su suegra.

«Hola, acabo de llamar a Leo y me han contestado del Clínic, dicen que Leo está allá, que está herido, yo no puedo ir porque la bebe duerme», decía angustiada Virginie. “Salí corriendo, desesperada, temiendo lo peor”, dice Elena.

El médico de urgencias le dijo a Elena que su hijo se estaba muriendo, ya que tenía un grado de coma elevado por un traumatismo craneoencefálico severo.

Después de esa intervención, Leo fue sometido a 20 operaciones más, tuvo un post operatorio complicado, pero más complicada ha sido su rehabilitación.

Elena se ha gastado el patrimonio de su empresa, una agencia de viajes. “Desde que Leo comenzó su rehabilitación he gastado entre 6.000 y 8.000 euros al mes, estoy totalmente endeudada”.

Todo por robar

Cinco delincuentes han cercenado la vida de un hombre sólo por robarle, y la policía, a pesar de las cámaras de vigilancia, cuyos vídeos han perdido -asegura Elena- y, a pesar, de las fotos que les han dado de los atracadores, no avanza. “Dicen que debe ser Leo quien los identifique, pero mi hijo no puede y no lo entienden”.

Elena Allende, la madre de Leo, explicó cuál es la situación de su hijo, lo último que sabe de las investigaciones policiales y se refirió también a la inseguridad ciudadana de la ciudad de Barcelona, que está entre las más peligrosas de España con una media de 21 delitos denunciados por hora.

La madre de Leo se entrevistó con la alcaldesa de Barcelona Ada Colau con el objetivo de que la ayudase a conseguir una plaza subvencionada en un centro sanitario para el cuidado de Leo.

Tres semanas después, en plena campaña electoral, Colau vino a un evento a mi barrio y fui desesperada a reclamarle porque prometió ayudarme, pero no lo hizo”.

También acudió al Consulado peruano

Además, había iniciado una petición en Change.org para conseguir una plaza subvencionada para su hijo. Quería que a través de las redes de la delegación peruana la ayudasen a difundir la campaña entre los connacionales que se encuentran en todo el territorio español, pero, según afirma, “el resultado no fue el esperado”.

El núcleo duro

Leo tiene hoy 38 años y su madre y hermano se ocupan de él.

La vida de la familia Higa Allende se ha visto trastocada, su único objetivo es cuidarlo las 24 horas del día, él sigue y avanza porque tiene una madre que lo sustenta, un hermano que ha dejado su vida por él y una tía que cuando es necesario les llena la nevera porque en esa casa lo primero es Leo y sus tratamientos.

Leo Higa no volverá a ser la persona que era, su madre lo sabe y aunque eso la apena ahora sólo quiere que él pueda vivir con dignidad y es por esa dignidad que ella no escatima esfuerzos.

Elena reclama que se siga la investigación por parte de los mossos ya que hay 5 delincuentes peligrosos que siguen libres en el barrio de Sants-Montjuïc.

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