La fiscalía pide hasta 8 años y medio de cárcel para los narcos del Raval

La fiscalía pide hasta 8 años y medio de cárcel para los narcos del Raval

La fiscalía de Barcelona pide entre siete y ocho años y medio de prisión para 58 presuntos integrantes de una banda que gestionaba narcopisos y puntos de venta de droga en el barrio de El Raval de Barcelona, ​​trama que fue desarticulada en octubre de el año pasado en una macrooperación de los Mossos y la Guardia Urbana llamada Bacar.

En los respectivos escritos de acusación, el ministerio público detalla que este presunto grupo de narcotraficantes estuvo activo al menos entre los meses de febrero y octubre de 2018, y que distribuía principalmente cocaína, crack, heroína, MDMA, hachís y marihuana en el distrito de Ciutat Vella.

Los acusados ​​presuntamente «conformaban un entramado dedicado a ocupar ilícitamente pisos y locales del distrito con el fin de vender sustancias estupefacientes, bien en puntos de venta, lugares donde los consumidores podían adquirir las sustancias y consumir fuera, bien en narcopisos, donde después de comprar las sustancias estupefacientes debían consumirlas obligatoriamente en el interior».

La base de la organización descrita por la fiscalía estaba formada por trabajadores, que hacían turnos en los pisos para estar las 24 horas del día.

Los responsables de los pisos, que controlaban la cantidad de droga en cada punto y llevaban la contabilidad; los fines de domicilio, que recaudaban las ganancias, resolvían conflictos y buscaban nuevos pisos para ocupar; y los suministradores, que conseguían las sustancias y las «cocinaban».

Los jefes de domicilio tenían, según la fiscalía, un «continuo contacto telefónico» con el resto de integrantes de la trama, por lo que en las conversaciones utilizaban términos como blanca, blando, Tronch, Cronch, cerveza, café o tostada para referirse a los diferentes tipos de droga.

Los acusados presuntamente «formaban parte de células o grupos» que se relacionaban entre ellos, por lo que la organización no era estanca, sino móvil, según los intereses personales de cada uno de los miembros y según las necesidades apreciadas por los jefes.

La fiscalía considera que nueve de los acusados ​​eran los responsables de dirigir las diferentes células que operaban en El Raval y la pena más alta que pide es de ocho años y medio para uno de ellos ya que, además de presuntamente traficar y formar parte de la organización, tenía un arma de fuego.

La fiscalía pide hasta 8 años y medio de cárcel para los narcos del Raval