Daniel Sancho se defendió de una agresión y la policía lo engaño para que firmase su culpabilidad
Los abogados de Daniel Sancho acusan a la policía de Tailandia de engañarle hasta que confesó el asesinato del cirujano colombiano Edwin Arrieta, el pasado verano.
En una rueda de prensa este viernes en Madrid que ha generado una gran expectación, los defensores de Sancho, que sigue encarcelado a la espera del juicio que debe celebrarse el 9 de abril, han asegurado que, cuando declaró ante la policía tras ser detenido, los agentes «engañaron a Daniel con una orden de deportación que no existía» y le prometieron que estaría en España dos días después.
Según la abogada Carmen Balfagón, además, tradujeron mal su declaración. «Daniel declara que hay una pelea y un intento de agresión sexual, él se defendió y resultó muerta la víctima», ha explicado. Unos hechos que, aseguró, «no son los que transcribió la policía». Según explicó, tradujeron que lo hizo intencionadamente y que, de hecho, compró herramientas para perpetrar el crimen, lo que negó rotundamente.
Añadió que la policía «hizo documentos falsos» mientras se ganaba la confianza del detenido con el objetivo de que confesara un crimen pasional.
Para demostrarlo, la abogada ha mostrado fotos, algunas inéditas, en las que se ve que los policías mantenían a Sancho en un ambiente distendido, llevándole hamburguesas y dejándole estar fuera de la comisaría sin esposas, e incluso, ha explicado, llevándolo a uno de los mejores restaurantes de Tailandia.
Sancho admite haber descuartizado, pero no asesinado
Durante una vista oral en noviembre ante el tribunal de la isla de Samui, Sancho ya aseguró que la muerte de Edwin Arrieta fue por un accidente, en el que pareció un cambio de versión respecto a la declaración policial. Lo que dicen ahora sus abogados en España es que siempre mantuvo la misma, pero que la primera vez, frente a la policía, no se le interpretó y tradujo correctamente.
Según ellos, nunca confesó haber matado de forma intencionada a Arrieta, sino «solo» haberle descuartizado y ocultado su cuerpo.
Sin embargo, confían en la justicia tailandesa, que han dicho que es «garantista con los derechos humanos», y que el juicio se celebre «con todas las garantías».
Daniel Sancho, hijo del actor Rodolfo Sancho, sigue en prisión provisional por la muerte del cirujano colombiano el pasado 2 de agosto en la turística isla de Phangan, en el sur de Tailandia, y se enfrenta a la pena de muerte.
La Fiscalía le acusa de tres delitos, asesinato premeditado, ocultación del cuerpo y destrucción de documentación ajena –en referencia al pasaporte de Arrieta–. De éstos, Sancho sólo se ha declarado ante el juez culpable del segundo.