Catalunya cierra bares, restaurantes y espacios de ocio

Catalunya cierra bares, restaurantes y espacios de ocio

El Gobierno catalán incluyó anoche en el Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya (DOGC) el cierre de bares, cafeterías y restaurantes dentro de las medidas restrictivas para frenar el ritmo de contagios por coronavirus.

Deberán bajar todos la persiana excepto los que estén integrados en un hotel, un centro sanitario o un centro social residencial.

Los establecimientos de restauración y bares se suman a la batería de locales que también tendrán que cerrar las puertas, entre los que hay locales de ocio, grandes superficies y centros comerciales, excepto los establecimientos dentro de las áreas que vendan productos como alimentos, limpieza o higiene.

La publicación del DOGC ayer amplió las primeras medidas que había dictado el conseller de Interior, Miquel Buch, horas antes en rueda de prensa.

En un primer anuncio hecho por el Gobierno, bares y restaurantes quedaban fuera de las restricciones.

Gimnasios, instalaciones deportivas y estaciones de esquí también quedan clausurados mientras dure la crisis, ya sean de titularidad pública como privada.

Teatros, cines, salas de fiesta, discotecas, pubs, salas de baile, salas de concierto, karaokes, cafés teatro y cafés concierto y «cualquier otro establecimiento recreativo» quedan también acogidos a esta normativa, según detalla el DOGC con una precisión que no se ha dado en las dos comparecencias públicas.

El documento enumera también salones recreativos, casinos, bingos o parques de atracciones y temáticos «y cualquier otro centro que realice actividades de ocio» como parte de la larga lista de espacios que tienen que cerrar puertas.

Se suspenden toda clase de actividades de espectáculos públicos y actividades en espacios cerrados y espacios abiertos.

Las restricciones afectan también a otros ámbitos de la vida cotidiana como las vigilias a difuntos, que quedan también suspendidas.

En cuanto al transporte público, seguirá funcionando, intentando que no se ocupe más de un tercio del aforo y se requerirá un plan de contingencia para los casos de emergencia.

La Generalitat se reserva el derecho a aplicar medidas más restrictivas si no se alcanza el objetivo, como retirar la venta de billetes o limitar el acceso a los transportes.

En el ámbito de los servicios sociales, el DOGC establece el cierre de los centros de desarrollo infantil y los de atención a personas con discapacidad, así como los de terapia ocupacional o de inserción ocupacional. «Para los usuarios de estos servicios que requieran continuidad de la atención, se garantizará en el dispositivo más adecuado», aclara el decreto.

En el mundo rural, el Gobierno prohíbe las batidas de caza y las acciones de caza colectiva, aquellas en las que participen dos o más cazadores.

La medida entró en vigor ayer mismo para poder blindar el país de cara al fin de semana.

El objetivo es evitar la propagación del coronavirus todo el territorio, bajar el ritmo de contagios y, al mismo tiempo, evitar el colapso del sistema sanitario.

Un comité de expertos evalúa el posible cese de otras actividades.

Sin obligación de confinamiento

Hoy por hoy no hay obligación de confinamiento de las personas en su casa de manera generalizada, pero el conseller sí pidió a la población que limite los desplazamientos y recomendó el aplazamiento de encuentros, manifestaciones o reuniones que puedan provocar aglomeraciones más allá de los pequeños encuentros familiares.

Durante el día de ayer, comercios y bares funcionaron con normalidad, pero con una afluencia muy disminuida por la crisis, aún más acentuada tras el anuncio de Pedro Sánchez de establecer el estado de alarma.

Catalunya cierra bares, restaurantes y espacios de ocio