Biden aterriza en Israel el día que Hezbollah anuncia un «miércoles de ira sin precedentes»
Joe Biden se reúne en Israel con Benjamin Netanyahu, horas después del ataque al hospital Al-Ahli de Gaza, en el que el ejército de ocupación israelí ha matado a más de 600 personas.
Israel a atribuido el ataque a Hamás y una de las primeras palabras del presidente de Estados Unidos en Tel Aviv ha sido justamente para apoyar la versión israelí: «De acuerdo con lo que he visto, parece que ha sido la otra parte, pero hay mucha gente que no está segura, así que tendremos que superar muchas cosas», ha dicho Biden ante los medios que registraban el inicio de la reunión con el primer ministro Netanyahu.
Biden ha dicho que está «profundamente triste e indignado» por el ataque, al tiempo que ya destacado el «coraje, el compromiso y la valentía» del pueblo israelí. Esto, después de que Netanyahu le agradeció la visita y afirmó: «De la misma manera que el mundo civilizado se unió para derrotar a los nazis y se unió para derrotar al Estado Islámico, debería unirse para derrotar a Hamás».
El ataque al hospital de Gaza ha provocado la cancelación del encuentro posterior que Biden tenía previsto en Jordania con el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, así como con el rey Abdullah de Jordania y el presidente de ‘Egipto, Abdel Fattah al-Sisi.
«Si se celebra esta cumbre, queremos que salga una solución que no sea otra que detener la guerra, respetar a la humanidad de los palestinos y entregarles la ayuda que merecen», ha afirmado el ministro de Exteriores jordano, Ayman Safadi, tras anunciar que no acogerían el encuentro del presidente estadounidense con los líderes árabes.
Según la Casa Blanca, se ha suspendido de forma consensuada, después de una conversación de Biden y el rey jordano. «Ambos coincidieron en que ahora no es el momento de intentar organizar esta reunión, después de que el presidente Abbas dejó muy claro, comprensiblemente, que quería volver a casa para pasar tres días de luto», afirmó el portavoz, John Kirby.
Hezbollah anuncia un «miércoles de la ira»
El ataque al hospital ha generado una ola de indignación en el mundo árabe, con manifestaciones en varias poblaciones en protesta por el ataque. En Ammán, la policía jordana ha dispersado a los manifestantes que han intentado asaltar la embajada israelí. Por otra parte, en Túnez, cerca de 2.000 personas se concentraron ante la embajada francesa para denunciar la agresión israelí contra la Franja de Gaza.
La milicia chií Hezbollah hizo un llamamiento para que hoy sea un «miércoles de ira sin precedentes» contra Israel y animó a la población a salir a la calle al considerar que, tras el ataque al hospital, las denuncias ya no son suficientes.
«Hacemos un llamamiento a la gente de nuestra nación árabe e islámica para que emprendan acciones inmediatas en las calles y plazas para expresar su intensa ira y poner presión sobre los gobiernos».
Según el grupo chií, el ataque contra el hospital de Gaza es una continuación de las masacres cometidas por Israel desde su fundación.
Coincidiendo con la visita de Biden, ha acusado a Washington de ser responsable directo del bombardeo y también del resto de crímenes israelíes.
Hamás dice que supondrá «un punto de inflexión»
El líder político del movimiento, Ismail Haniyeh, afirmó que el ataque al hospital supondrá «un punto de inflexión» en la operación contra Israel y animó a los árabes y musulmanes a unirse a las protestas.
En un discurso televisado, Haniyeh ha dicho que el bombardeo confirma la brutalidad del enemigo y la envergadura de la profunda derrota que sufrió.
Según el líder de Hamás, después de este ataque Israel será atacado «en todos los frentes».