46 estados de EE.UU. demandan a Facebook por la compra de Instagram y WhatsApp
Las autoridades federales y 46 estados de Estados Unidos han demandado a Facebook.
Las autoridades acusan a la red social de violar normas a favor de la libre competencia y se marcan el objetivo de acabar con lo que califican de «monopolio ilegal» por haber adquirido Instagram y WhatsApp. Las demandas tienen como objetivo «restaurar la competencia» en el mercado.
Prácticamente al mismo tiempo, la Comisión Federal de Comercio y los fiscales de 46 estados, el Distrito de Columbia (donde está la capital, Washington) y Guam han hecho públicas las demandas contra la red social creada por Mark Zuckerberg.
Las demandas son fruto de una larga investigación y acusan Facebook de adquirir de forma ilegal competidores como Instagram o WhatsApp y privar a los consumidores de los beneficios de un mercado competitivo y de mejores protecciones de privacidad.
Entre las medidas que reclaman, destaca que los tribunales fuercen a Facebook a deshacerse de estas dos aplicaciones, que compró por miles de millones de dólares. Facebook pagó unos 1.000 millones de dólares el año 2012 por Instagram y, en 2014, gastó 16.000 para adquirir WhatsApp.
La fiscal general del estado de Nueva York, Letitia James, que ha liderado la demanda estatal, acusó a la compañía de Zuckerberg de usar «su dominio y poder» para «aplastar rivales más pequeños y acabar con la competencia»:
«En vez de competir sobre la base de los méritos, Facebook utilizó su poder para suprimir la competencia y, así, poder aprovecharse de los usuarios y ganar miles de millones convirtiendo los datos personales en una vaca lechera».
Los fiscales de Alabama, Carolina del Sur, Dakota del Sur y Georgia son los únicos que no participan en la demanda.
Facebook responde que las demandas ignoran los efectos para los usuarios
La red social dirigida por Mark Zuckerberg ha respondido a las demandas antimonopolio asegurando que no tienen en cuenta los efectos que tendrán sobre la comunidad empresarial y los usuarios de estos servicios.
En un comunicado, Facebook califica de «revisionismo» las demandas:
«Después de haber aprobado nuestras adquisiciones hace años, ahora el gobierno quiere un segundo intento sin preocuparse por el impacto que un precedente así tendría para el conjunto de la comunidad empresarial o para la gente que elige utilizar nuestros productos cada día».
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