Hace un año que 4.000 personas viven sin luz ni calefacción en la Cañada Real

Hace un año que 4.000 personas viven sin luz ni calefacción en la Cañada Real

Hoy se cumple un año desde que el Gobierno de la Comunidad de Madrid en colaboración con Naturgy, decidieran privar de corriente a 4.000 personas, incluidos 1.800 niños y niñas, en la Cañada Real.

El invierno pasado varios bebés fueron ingresados en hospitales con síntomas de hipotermia. Además, la muerte de una persona mayor como consecuencia del frío en su hogar fue denunciada por la familia del fallecido. El curso escolar para niños, niñas y adolescentes, quedó gravemente afectado por la falta de medios para atender las clases online, teniendo que alumbrarse con una vela para hacer los deberes.

Este atropello de Derechos Humanos ha sido denunciado por organizaciones e instituciones nacionales e internacionales, como el Defensor del Pueblo y el Comité de Derechos de los Niños. El Estado en su conjunto ha sido requerido para dar solución a través de su representación en Naciones Unidas.

A pesar de todo ello, se avecina otro invierno sin que la Comunidad de Madrid haya movido un solo dedo para garantizar el acceso básico al suministro eléctrico.

La falta de vivienda accesible empuja a familias humildes a instalarse en la zona de la Cañada Real desde hace años.

Isabel Díaz Ayuso trata como ciudadanos de tercera a los ciudadanos de la Cañada Real, en el mayor atropello de los derechos humanos, que tiene como objetivo los intereses urbanísticos.

Alejandra Jacinto, coportavoz de Unidas Podemos en la Asamblea de Madrid, llama a comprometerse con los más desfavorecidos.

«Todas las personas y organizaciones comprometidas con los Derechos Humanos estamos convocados para apoyar y dar aliento a nuestras vecinas en su lucha por la vuelta de la electricidad al barrio más vulnerable de la región antes de que avance el invierno. Seamos con ellas la luz que vence a la oscuridad«.

Hace un año que 4.000 personas viven sin luz ni calefacción en la Cañada Real