Nuevo BMW serie 7
El BMW Serie 7 es un gran sedán de lujo, que se sitúa como el producto más lujoso y distinguido de BMW – con diferencia – y que destaca sobre todo por ser la punta de la lanza tecnológica de la marca, el buque insignia en el que se estrenan las últimas tecnologías de la marca que a lo largo de los próximos años irán recalando progresivamente en otros productos más modestos.
Y el mejor ejemplo lo tenemos en el nuevo BMW Serie 5 y en la transferencia tecnológica que se ha producido desde el BMW Serie 7 para convertirlo, de alguna forma, en un Serie 7 en miniatura.
Los rivales del BMW Serie 7
Los modelos que mejor pueden equipararse, y hasta medirse de tú a tú, con el BMW Serie 7, son de nuevo los de sus rivales alemanes, el Mercedes Clase S y el Audi A8.
El aspecto más destacado del Mercedes-Benz tiene que ver con su estética elegante y lujosa y sus versiones más opulentas, con el sello Mercedes-Maybach.
El Audi A8 podría destacar por ser el más tecnológico del trío, y el último que se ha renovado, a finales de 2017.
El BMW Serie 7 es, en cualquier caso, un sedán de lujo muy tecnológico, muy confortable y lujoso, pero también muy enfocado al conductor.
De hecho nos ha parecido un coche realmente ágil y divertido, salvando las distancias, y para tratarse de un coche de lujo, que tradicionalmente hubiera estado más enfocado en el confort de los pasajeros de las plazas traseras, que en el placer de conducir.
El BMW Serie 7 y Carbon Core
Una de las claves de las cualidades del BMW Serie 7 la encontramos en el aligeramiento de su carrocería.
Este aligeramiento jamás se hubiera conseguido sin haber recurrido a una solución tan interesante como inteligente, que BMW ha denominado comercialmente como Carbon Core.
El coste y la complejidad industrial de producir piezas de fibra de carbono es alto, y crece proporcionalmente con el tamaño y la complejidad de esas piezas, que también aumenta en el momento en que es necesario unir entre sí piezas de fibra de carbono, o con piezas fabricadas en otros materiales.
De ahí que BMW decidiera optar por una metodología de construcción en la que muchos paneles del Serie 7 y travesaños se componen de aluminio, y están reforzados en su interior por fibra de carbono.
Gracias a esta tecnología, y otras mejoras, el BMW Serie 7 ha perdido hasta 130 kilogramos con respecto a su predecesor.
El BMW Serie 7 cuenta con elementos estructurales y de carrocería moldeados en aluminio, con un núcleo de fibra de carbono, ahorrando hasta 130 kilogramos con respecto al antiguo Serie 7.
La tecnología del BMW Serie 7
En su lanzamiento, el Serie 7 supuso la llegada a los concesionarios de tecnologías pioneras. Una de las más peculiares es la de ofrecer un sistema de entretenimiento, con una suerte de pantalla táctil, con la que se pueden introducir comandos realizando movimientos en el aire, sin tocar la superficie de la pantalla.
Así, por ejemplo, agitando la mano frente a la pantalla, o moviendo un dedo en círculos, podemos descolgar el teléfono cuando nos llamen, o subir el volumen del equipo de sonido. Más información del sistema de entretenimiento del Serie 7.
Otra tecnología innovadora del BMW Serie 7, que poco a poco han ido introduciendo otros modelos y fabricantes, es un sistema que permite aparcar el coche sin un conductor en su interior, utilizando la llave.
Como no podía ser menos, el Serie 7 también ha estrenado tecnologías pensadas para el confort de los pasajeros de las plazas traseras, tales como un tablet que permite controlar el sistema de entretenimiento o el climatizador, entre otras muchas funciones. Ver BMW Touch Command.
Motores del BMW Serie 7
La variedad de motores de gasolina del Serie 7 es tal, que este modelo puede adquirirse con motores tan variados como un 730i de cuatro cilindros y 258 CV de potencia, hasta los ocho cilindros del 750i de 450 CV y los doce cilindros del 760i de 610 CV de potencia.
En cuanto a los motores diésel del Serie 7 caben destacar los bloques de seis cilindros del 730d de 265 CV de potencia y un nuevo motor muy avanzado, con cuatro turbocompresores, el 750d de 400 CV de potencia.
También existe un Serie 7 híbrido y enchufable, el 740e, que entrega una potencia combinada de 326 CV y puede recorrer entre 44 y 48 kilómetros (según autonomía homologada) en modo eléctrico.