Marruecos, Libia y Turquía, regulan el flujo migratorio como presión a Europa

Marruecos, Libia y Turquía, regulan el flujo migratorio como presión a Europa

El gobierno marroquí ya ha reconocido públicamente que la permisividad de sus gendarmes fronterizos en Ceuta es una represalia de Rabat contra España por haber acogido al líder del Frente Polisario, Brahim Ghali.

Regular el flujo migratorio se ha vuelto a demostrar como una de las herramientas más eficaces que tienen los países mediterráneos para presionar a la Unión Europea.

Marruecos se siente fuerte y orgulloso desde que en enero Donald Trump se pusiera de su lado en el conflicto del Sáhara.

Y la actuación de ahora no es ninguna novedad, si recordamos los migrantes que saltaron las vallas de Ceuta y Melilla en 2005, cuando lograron superar a la policía marroquí. En ese momento toda Europa vio que había que convertir este país en el principal socio a la hora de luchar contra la inmigración irregular, y ayudar con los medios económicos y logísticos necesarios.

Hoy mismo el vicepresidente de la Comisión Europea, Margaritis Schinas, ha avisado de que Europa no se dejará intimidar o chantajear por nadie, a la vez que ha ofrecido a España medios y recursos para asegurar las fronteras de Ceuta y Melilla.

Pero la impermeabilización de la frontera nunca ha sido total. Y en algunos momentos ha sido especialmente accesible. El verano de 2014, por ejemplo, más de 900 migrantes se lanzaron desde las playas marroquíes en las aguas del Estrecho y llegaron en muy pocos días a costas andaluzas. Nadie vincula oficialmente este repentino tráfico de pateras con un incidente que había tenido el yate del rey Mohamed VI con una patrullera de la Guardia Civil, cerca de Ceuta, unos días antes. Pero la coincidencia no pasa desapercibida.

¿Qué hace Libia?

También el líder libio Muamar Gadafi administró sin pudor, ante los líderes europeos, la amenaza de una «Europa negra». En presencia del entonces primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, llegó a preguntar:

«¿cuál sería la reacción de los europeos cristianos y blancos ante una ola de africanos hambrientos e ignorantes?». Y puso precio para impedirlo: 5.000 millones de euros anuales.

Recibido con todos los honores por las primeras autoridades europeas, Gadafi estaba convencido de que su papel de «gendarme» de la migración era una seguro para su continuidad en el poder. Pero los líderes europeos no movieron un dedo por él cuando llegó la revolución. Eso sí, después, miles de embarcaciones precarias zarpaban los próximos años desde las playas libias hacia Lampedusa y otros destinos del Mediterráneo central.

Turquía y los refugiados sirios

Recep Tayyip Erdogan también es consciente del poder que le otorga el hecho de contener en Turquía a tres millones y medio de refugiados sirios, cuando la mayoría de ellos querrían ir a Europa. Recibe sumas multi millonarias de Bruselas.

Pero el febrero y marzo de 2020 decidió abrir la frontera, terrestre hacia Edirne y la marítima hacia Samos, porque Europa no se puso a su lado en el conflicto sirio, cuando 33 soldados turcos murieron en un bombardeo en Idlib. Turquía, que mantiene una relación más que complicada con Europa, demostró, con aquel movimiento, los efectos que puede facilitar una salida masiva de migrantes.

Y aquí está Marruecos

Por lo tanto, el movimiento de Marruecos en Ceuta no es una novedad. Parece una reacción puntual a una situación puntual. La reacción del gobierno español es la necesidad de preservar la integridad del territorio «por todos los medios».

En Madrid preocupa más la dormida reivindicación marroquí sobre la soberanía de Ceuta y Melilla que la situación del Sahara, que, según la ley internacional, sigue siendo español.

En todo caso, a Europa le interesa resolver rápidamente el problema. Marruecos es una pieza clave, también en la lucha contra el terrorismo.

Marruecos, Libia y Turquía, regulan el flujo migratorio como presión a Europa

Mohamed Alcalá
Mohamed Alcalá es periodista especializado en política de Oriente Medio. Además de colaborar en Timis Local News, lo hace también en diferentes diarios de prensa árabe en idioma inglés, como South Sudan News y Oman Rats. Publica también en prensa palestina.