La superliga, abordada al fracaso, los seis clubes ingleses abandonan

La superliga, abordada al fracaso, los seis clubes ingleses abandonan

Cuarenta y ocho horas después del anuncio de la creación de la Superliga, la nueva competición europea de fútbol vive su primera crisis grave, que de hecho puede representar el final.

Las amenazas y las presiones de la FIFA, la UEFA, las federaciones, las ligas, los principales gobiernos europeos y los aficionados británicos han hecho que los seis clubes ingleses que formaban parte se dieran de baja, por lo que la competición se reduciría a Juventus, Inter, Milan, Real Madrid, FC Barcelona y Atlético de Madrid.

El Manchester City ha sido el primero que en un comunicado oficial dijo que se desvinculaba del proyecto. «El Manchester City Football Club puede confirmar que ha emprendido formalmente los procedimientos para retirarse del grupo que desarrolla planes para una Superliga Europea», dijo el club en un breve comunicado.

En cuanto a los otros clubes, una multitud de aficionados del Chelsea protestaron en las cercanías del estadio de Stamford Bridge esta tarde y han intentado bloquear a él la entrada de los futbolistas, que tenían que disputar un partido de la Premier. Varios jugadores de los clubes británicos también se han pronunciado contra la Superliga, como los del Liverpool.

Los doce clubes fundadores han convocado esta madrugada una reunión de urgencia para analizar la situación. Por la tarde, un juzgado de Madrid había prohibido a la FIFA, la UEFA y las federaciones y ligas asociadas que tomaran medidas contra los clubes.

Asimismo, ha habido más movimientos. El vicepresidente ejecutivo del Manchester United, Ed Woodward, anunció que dejaría el cargo a finales de año. Asimismo, la Juventus ha desmentido públicamente que su presidente y vicepresidente de la Superliga, Andrea Agnelli, haya dimitido, tal como se había rumoreado desde la retirada de los equipos británicos.

De todos modos, todos los focos apuntan ahora hacia Florentino Pérez, presidente del Real Madrid y cara más visible de la nueva competición. Anoche, el magnate de la construcción debía ser entrevistado en el programa deportivo El Larguero, pero no se presentó.

Un día antes, había asegurado que quería poner en marcha tan pronto como se pueda la Superliga, ya que, según él, es la única manera de «salvar el fútbol». Unas horas más tarde, el proyecto se viene abajo.

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