La falsa víctima de Malasaña mintió para ocultar a su novio la infidelidad
El joven de 20 años que denunció ser víctima de un brutal ataque homófobo hace unos días en el madrileño barrio de Malasaña ha reconocido finalmente a la policía que lo hizo a instancias de su novio, que desconocía lo ocurrido, y para ocultarle que las heridas fueron fruto de una práctica masoquista consentida con otros dos hombres.
El chico afirmó que después de dichas prácticas sexuales vio la gravedad de las heridas, con marcas de un cúter en el labio y en la nalga tatuada la palabra ‘maricón’, y llamó a su pareja. Entonces, fue el novio a su casa y le curó las heridas.
La falsa víctima no quería que su novio se enterara de que le había sido infiel con dos hombres y por eso supuestamente se inventó la versión de la agresión de ocho hombres encapuchados a la puerta de su casa. La pareja le insistió, ante la gravedad de lo sucedido y engañado, a que acudieran al centro de salud, donde la enfermera que le asistió le indicó que comunicaría a la Policía lo ocurrido, siguiendo el protocolo de agresiones.
Por ello, y a instancias también de su novio, el joven denunció presencialmente los hechos ante la policía. Los agentes investigaron las cámaras de seguridad de la calle donde vive, otras aledañas e incluso las del Metro de Tribunal, sin encontrar rastro de gente encapuchada.
A la hora a la que se refirió el falso denunciante, el domingo a las 17 horas, solo se le veía al denunciante entrando tranquilamente en su casa. Los agentes habían interrogado estos dos días a comerciantes y vecinos de la zona y tampoco había escuchado nada.
Entonces, los investigadores analizaron el móvil y las redes sociales del denunciante, y comprobaron que ese día había quedado para practicar sexo masoquista con otras dos personas. El joven en cuestión aseguró en un primer momento que no conocía a los autores de su agresión.
Ante ello, y las contradicciones de la denuncia inicial, los policías llamaron esta tarde de nuevo a la supuesta víctima para cotejar que lo ya investigado «no cuadraba» con lo que les contaba. Entonces, el joven se derrumbó y admitió que la historia «se le había ido de las manos» y que «solo quería tapar» lo ocurrido para que no se enterara su novio.
La Policía Nacional ya ha cerrado el atestado para mandar el caso ante la Fiscalía para que pudiera instruir e imputarle, si así lo considerara un delito de denuncia falsa, con penas máximas entre seis meses y dos años de cárcel.
La falsa víctima de Malasaña mintió para ocultar a su novio la infidelidad