El BCE subirá los tipos de interés un 0,25 en julio
El BCE llevaba semanas emitiendo señales, había avisado, y ahora ha cumplido las advertencias. La época de tipos de interés en torno al cero por ciento finalizará este julio, con una subida de 0,25 puntos, que afectará a sus ventanillas de crédito.
En la reunión de este jueves, ha mantenido el principal tipo de interés al 0%, y sigue penalizando con una comisión del 0,5% a los bancos que aparcan su dinero en el BCE en lugar de dar crédito a empresas y familias. Pero todo esto termina este julio.
Frenar la inflación
La presidenta del Banco Central Europeo ha arrancado su comparecencia ante la prensa enmarcando la lógica de su decisión. «La alta inflación es un gran reto para nosotros. Y nos aseguraremos que devuelve al 2% a medio plazo», ha dicho Christine Lagarde.
Para llegar a este número, el BCE cree que debe «normalizar» su política monetaria, lo que significa subir los tipos de interés por primera vez desde 2011.
Este julio, la subida será de 0,25 puntos básicos, y ya ha avisado de que volverá a encarecer el precio del dinero en septiembre. Incluso ha insinuado que la subida de septiembre puede ser aún más potente, quizá de 0,50 puntos, si la inflación persiste.
Una nueva etapa
Es una nueva etapa que puede ser larga, porque el servicio de estudios del BCE pronostica que la inflación no volverá a niveles aceptables, en torno al 2%, hasta el 2024. Ante la escalada de precios, los bancos centrales están encareciendo precio del dinero y hacen así más difícil endeudarse.
Esto debería frenar la actividad, reducir la demanda y, a la larga, contener los precios. Aunque, de paso, pueda provocar un frenazo económico. El BCE espera que, una vez se desvanezca la crisis de suministros, la falta de materias primas y la sacudida del conflicto en Ucrania, la economía europea podrá reanudar la recuperación pospandemia.
Se termina la compra de deuda
Si era tan urgente intervenir, la pregunta para la presidenta del BCE fue por qué no subieron los tipos de interés en su reunión de hoy, en lugar de dejarlo para julio. Según Lagarde, han preferido ser «predecibles» y ceñirse al calendario previsto.
Lagarde ha explicado durante los últimos meses que la «normalización» pasaba, primero, por acabar con el programa de compra de deuda pública y privada que ha estado en marcha desde marzo de 2015. Un programa que debía terminar antes, pero que la pandemia reavivó.
Este 1 de julio, el BCE abandonará este programa, si «se cumplen los requisitos» marcados para poder iniciar la siguiente fase: subir tipos de interés.