Detenidos en Madrid los autores del secuestro a Zaryn Dentzel, fundador de Tuenti
Tres hombres y una mujer han sido detenidos por la policía en Madrid por el secuestro del empresario Zaryn Dentzel, fundador de Tuenti, porque querían acceder a su monedero virtual, donde tenía 25 millones de euros. Ya han entrado en prisión, tras ser puestos a disposición judicial.
Los consideran autores de los delitos de secuestro, robo con violencia e intimidación, lesiones, coacciones, amenazas y estafa.
El año pasado, el grupo entró en el piso del empresario, en el barrio del Retiro de Madrid, cuando el conserje se había marchado a comer. Dentzel invertía desde hace años en criptomonedas y querían que les diera las claves de acceso al monedero digital.
El empresario estadounidense fundó en 2006 la red social Tuenti, que llegó a tener millones de usuarios. En el 2010 se la quedó Telefónica por 72 millones, pero él siguió al frente. Ahora Tuenti ya sólo funciona como operador de telefonía.
Zaryn Dentzel es junto a Félix Ruiz y Rosauro Varo, fundador de Vector Ronda, la empresa de VTC de Cabify. Además, están también Bernardo Hernández (cofundador de Idealista, ex de Google y ex presidente ejecutivo de la red social) y Hugo Arévalo (inversor en empresas como Cabify, Tuenti y Hawkers).
Robaron tarjetas y relojes
Los ladrones no pudieron acceder al monedero digital, pero no se fueron de vacío. Se llevaron tarjetas bancarias, relojes de lujo que tenía en la caja fuerte y otros objetos robados que pusieron dentro de dos maletas de aluminio.
Los ladrones, que utilizaron la violencia, iban con la cara cubierta y llevaban una pistola eléctrica y armas blancas. Una vez dentro de la casa, maniataron al propietario y también a un trabajador de mantenimiento que se encontraron allí, al que rociaron a los ojos con un spray pimienta.
Antes de salir, limpiaron las huellas e incluso utilizaron productos de limpieza sobre las víctimas. La mujer logró después sacar unos 2.000 euros de las tarjetas bancarias.
La policía vio que el grupo criminal tenía mucha información sobre la víctima y sus hábitos, para planear el asalto.
Tras meses de investigación, pudieron identificar a los cuatro miembros del grupo criminal. Según la policía, se trata de dos parejas que se pusieron de acuerdo para el delito, pero que no se habían visto personalmente hasta el momento de los hechos, lo que hacía más difícil vincularlos entre sí.
La mujer se trasladó al Reino Unido y se pidió la colaboración a los servicios británicos, que informaron a la policía de dónde estaba en todo momento.
Cuando la mujer regresó a España, los investigadores prepararon un operativo para detener a todo el grupo.