Detenido en Dubái el jefe de la camorra napolitana, vinculado al robo de los Van Gogh
Uno de los hombres más buscados de Italia, un presunto narcotraficante sospechoso de haber comprado dos cuadros de Van Gogh robados en el mercado negro, ha sido detenido en Dubai.
Raffaele Imperiale, el presunto cabecilla de la camorra napolitana, fue arrestado el 4 de agosto, según ha informado este jueves la Guardia di Finanza a través de un comunicado.
Imperiale, de 46 años, está detenido en los Emiratos Árabes Unidos mientras el Ministerio de Justicia de Italia completa los procedimientos de extradición.
Desde enero de 2016, Italia ha buscado a Imperiale por tráfico internacional de drogas como parte de la actividad del crimen organizado, según el Ministerio del Interior italiano. Fue considerado uno de los fugitivos más peligrosos y buscados de Italia.
“Pudo construir una imponente red de narcotráfico internacional, en particular de cocaína”, dijo la policía. Según los investigadores italianos, Imperiale comenzó como un «intermediario internacional» en el tráfico de drogas a principios de la década de 2000, con sus vínculos con los poderosos clanes de la Camorra que sobrevivieron a varias disputas entre los mafiosos de Nápoles.
En 2016, dos obras de Van Gogh, robadas en 2002 de un museo de Ámsterdam, fueron encontradas escondidas en una granja en la propiedad de Imperiale en su ciudad natal, Castellamare di Stabia.
“La riqueza acumulada ilícitamente le permitió comprar en el mercado negro dos cuadros de Van Gogh de valor no cuantificable”, dijo la policía. Se refirieron a la Vista del mar de 1882 en Scheveningen y una obra de 1884-1885, Congregación dejando la Iglesia Reformada en Nuenen, que había sido robada del Museo Van Gogh en Amsterdam.
La policía italiana encontró los cuadros envueltos en sábanas de algodón, metidos en una caja y escondidos detrás de una pared en un baño. Las obras de arte fueron descubiertas como parte de una confiscación de propiedad de Imperiale y otro capo de la droga de la Camorra.
La policía señaló que Imperiale a principios de este año concedió una entrevista al diario de Nápoles Il Mattino en la que negó cualquier vínculo con el robo de las pinturas y afirmó que compró las obras porque es un apasionado amante del arte.
“Se los compré directamente al ladrón, porque el precio era atractivo. Pero sobre todo porque amo el arte», dijo Imperiale al diario. No ocultó haber vivido en Dubai durante varios años.
Imperiale, parte del clan Amato-Pagana, se fue de Italia a Ámsterdam en la década de 1990 para administrar una cafetería y comenzó a aliarse con los traficantes holandeses, según el diario italiano La Repubblica.
Después de comerciar por primera vez con éxtasis, puso su mirada en el comercio de cocaína más lucrativo, moviendo toneladas de drogas a Holanda para el mercado europeo con la ayuda de traficantes sudamericanos, mientras que al mismo tiempo operaba restaurantes y compañías de inversión, dijo el diario.
Detenido en Dubái el jefe de la camorra napolitana, vinculado al robo de los Van Gogh