Cuixart y Sánchez ya pueden tener hoy permisos de salida, a pesar de la polémica del tercer grado

Cuixart y Sánchez ya pueden tener hoy permisos de salida, a pesar de la polémica del tercer grado

Hoy Jordi Sánchez y Jordi Cuixart ya pueden obtener permisos para salir de la prisión de Lledoners.

Ya han cumplido una cuarta parte de la condena de nueve años impuesta por el Tribunal Supremo el 14 de octubre pasado.

Fuentes de la defensa de Sánchez explican que es muy probable que ya haya pedido el permiso, porque es una petición que debe hacer él personalmente en el centro penitenciario.

En cambio, Òmnium no quiere detallar cuando lo pedirá Cuixart.

Fuentes de la entidad explican que es un procedimiento que forma parte del ámbito privado, pero que lo pedirá porque ‘tiene derecho y no implica ningún reconocimiento’ de los delitos por los que lo ha sentenciado el Supremo.

La semana pasada el Departamento de Justicia validó el segundo grado que las juntas de tratamiento de las prisiones de Lledoners, Mas d’Enric i el Puig de les Basses habían dado a los nueve presos.

Era la última etapa para quienes ya hubieran cumplido un cuarto de la condena antes de poder acogerse a permisos penitenciarios.

Ahora podrán pedir salir treinta y seis días al año y, si tienen trabajo fuera de la prisión, podrán tener un régimen bastante abierto.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que no es automático.

Son requisitos mínimos y no obliga a la administración penitenciaria a conceder el permiso.  Son los funcionarios de la Junta de Tratamiento de cada prisión los que deben decidirlo.

La defensa de Jordi Sánchez cree que no habrá ningún problema en conceder el primer permiso, pero esperan la decisión con cautela.

Con el segundo grado otorgado, la demanda del tercero no se apaga

Las defensas de algunos presos, sobre todo los vinculados a Junts per Catalunya, fueron las más activas a solicitar el régimen penitenciario más flexible.

La Coordinadora de la Abogacía de Catalunya explicaba ayer en un artículo a VilaWeb que la legislación permite darlo sin impedimentos.

Por un lado, el artículo 72.3 permite el acceso directo al tercer grado a un condenado, mientras que el 104.3 dice que no es necesario haber extinguido una cuarta parte de la condena, como es el caso de la mayoría de los presos del El Procés.

‘La ley es clarísima. Hay gente que dice que con penas de diez o doce años no se puede dar el tercer grado tan deprisa. Pero es que si en situaciones excepcionales no somos capaces de aplicar la literalidad de la ley, cuando la tenemos que exigir?’, Dice Jordi Domingo, abogado miembro de este colectivo.

Y añade que si se quiere optar por una actitud ‘conservadora’ que evite la confrontación con el Supremo -porque un recurso sobre el tercer grado podría llegar-, hay que decirlo claramente, pero ‘la Generalitat podría tener todos los presos en la calle mañana mismo, porque esto es una batalla política’.

Cuixart y Sánchez ya pueden tener hoy permisos de salida, a pesar de la polémica del tercer grado