Martinez-Almeida sigue sin regular las VTC

La Generalitat regulará las VTC en Catalunya

La Generalitat regulará las VTC en Catalunya a través de dos Decretos Ley que se aprobarán la próxima semana.

De esta manera sólo se podrá pedir Uber y Cabify con mínimo seis horas de antelación.

El Gobierno de Catalunya aprobará en los próximos días dos nuevos decretos que modificarán la ley catalana de transporte e influirá en una limitación a la actividad de las empresas VTC, tal como han afirmado fuentes del sector,  que han tenido acceso a los documentos oficiales.

Una vez entre en vigor este nuevo decreto sólo se podrá pedir un Uber y un Cabify si se reserva con entre seis y doce horas de antelación.

Esta medida, impulsada personalmente por el consejero de Transportes, Damià Calvet, será anunciada en los próximos días y podría suponer el cierre definitivo de ambas ampliaciones en Cataluña.

Los decretos se aprobarán antes de final de mes

Estos dos nuevos decretos ley serán aprobados antes del 25 de enero.

El primero, Real Decreto 4/2019 habilita a todos los ayuntamientos de la Comunidad Autónoma a regular las VTC.

Mientras que el otro habilita al Área Metropolitana de Barcelona (AMB), organismo con regulación jurídica propia, con la intención de evitar que las nuevas medidas puedan ser tumbadas judicialmente.

En un documento interno de la AMB, el organismo reconoce que hay un «compromiso de la Generalitat de Cataluña de aprobar un decreto ley lo más rápido posible» y «traspasar a la legislación catalana las nuevas normas en materia de transporte de viajeros y de vehículos de alquiler con conductor.

Reconociendo de esta manera la competencia de las administraciones locales y el AMB». Lo que se traduce como una regulación fuertemente restrictiva contra las VTC.

No obstante esta regulación ya existe a través de Orden Ministerial 36/2008, de 9 de enero (BOE nº 19, de 22 de enero de 2008).

De esta manera, se pondrá fin a la contratación ilícita por parte de las empresas como Uber y Cabify, que realizan servicios de taxi sin autorización.

Además, las empresas de VTC que siempre han trabajado cumpliendo con la normativa existente, podrán recuperar la normalidad y recuperar el nivel de convivencia con el taxi que siempre ha existido.

El vehículo se tendrá que pedir con entre seis o doce horas de antelación

La principal barrera que impondrá la Generalitat es la necesidad de pedir un Uber o un Cabify con, al menos, seis horas de antelación, pero tampoco podrá superar más de doce horas.

Además, tanto los coches como los servicios que realiza cada coche deberán registrarse en un servicio habilitado por la AMB.

Los vehículos estarán obligados a llevar un aparato electrónico con el que irán enviando a cada momento sus movimientos y servicios contratados.

Además, el AMB incluirá también nuevas restricciones a las VTC, aún por definir, por motivos medioambientales, así como exigencias en materia de contratación laboral y seguridad social.

Finalmente, en el documento también señalan que «habrá que determinar condiciones como los horarios, los registros de servicios, las condiciones de precontratación y transparencia en las tarifas aplicadas».

Este último punto obligará a Uber y Cabify a hacer públicos sus algoritmos y sistemas de precios dinámicos para enviar a la Administración los detalles de cómo y por qué calculan los precios de cada trayecto.

La Generalitat regulará las VTC